Los agentes sociales han alcanzado este viernes un preacuerdo para una subida salarial que abarcará de 2023 a 2025 con un incremento del 10% en tres años.
En concreto, UGT, CCOO, CEOE y Cepyme han consensuado la recomendación en la negociación colectiva de subir los sueldos un 4% en 2023 y un 3% tanto en 2024 como en 2025.
Además de la subida salarial, se incluirá una cláusula de revisión anual con un posible aumento del sueldo de hasta el 1%. Este incremento adicional estaría en función de la evolución de los precios.
Así, los agentes sociales continúan trabajando en el preacuerdo, que deberán ratificar los máximos órganos de patronal y sindicatos. De hecho, la CEOE ha convocado para el lunes su comité ejecutivo.
Cuando lo hagan, quedará materializado el V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC). Sustituirá al IV AENC, que se aprobó el 5 de julio de 2018 y que prorrogaba en todos sus términos el anterior, de 2015.
No obstante, desde UGT matizan que no se trata en sí de un preacuerdo, sino de un “postura cercana”, ya que “todavía hay flecos por cerrar”.
Dicho esto, Yolanda Díaz, ministra de Trabajo y Economía Social, ha reaccionado a la noticia por Twitter felicitando a patronal y sindicatos.
Un acuerdo “importante destinado a proteger los salarios de las personas trabajadoras”, ha escrito.
Distinta ha sido la reacción de Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, que ha aprovechado la misma red social para cargar contra el Gobierno.
En su mensaje, acusa al Ejecutivo de renunciar a un pacto de rentas. Entretanto, ha alabado el trabajo de empresarios y sindicatos por actuar “con responsabilidad para que los españoles recuperen poder adquisitivo”.
Cabe recordar que la negociación del nuevo AENC llevaba bloqueada desde mayo de 2022. Entonces, la patronal se cerró a incluir cláusulas de revisión vinculadas a la inflación que garantizaran el poder adquisitivo de los trabajadores. Para los sindicatos, en cambio, esta era una cuestión irrenunciable.
En todo caso, la subida salarial preacordada se antoja insuficiente dada la pérdida de poder adquisitivo acumulada en los últimos años, que se acerca al 20%.