Javier Marín Vázquez. Graduado en Seguridad Pública, experto en Seguridad Pública.
Un ejército de 25.000 soldados del grupo Wagner marcha hacia Moscú. Eso me sugiere algunas reflexiones de pedagogía política a vuela pluma:
1.- Un Estado social y democrático de derecho es el que garantiza la igualdad ante la ley.
2.- En un sistema democrático, el imperio de la ley prima sobre el imperio de la fuerza.
3.- En un Estado democrático, el monopolio de la violencia legítima lo ejerce, exclusivamente, el gobierno, por medio de sus fuerzas armadas y de los cuerpos y fuerzas de seguridad, bajo el control de su parlamento, que es donde reside la soberanía nacional.
4.- Permitir la existencia de ejércitos privados comandados por oligarcas es prostituir la soberanía nacional.
5.- Los estados que permiten los ejércitos de mercenarios, para matar a la carta, al servicio de quien los quiera contratar, son proxenetas de sicarios para ejecutar acciones de violencia que los gobiernos de esos Estados no quieren asumir en primera persona, y así poder eludir las responsabilidades de las ilegalidades por los asesinatos que saben que están cometiendo.
6.- Cuando EEUU (grupo Blackwater); CANADÁ (Garda World); REINO UNIDO (G4S Secure Solutions); y RUSIA (Wagner); todos ellos estados capitalistas, presuntamente democráticos, permiten que aniden en su seno organizaciones de paramilitares criminales, están alimentando el nido de la serpiente de su propia destrucción.