Este miércoles vencía el plazo para que la Comisión de Justicia emitiera un nuevo dictamen acerca de la Ley de Amnistía. Sin embargo, este organismo solicitó una prórroga, que la Mesa del Congreso aprobó ayer.
Por tanto, otorga a la Comisión hasta el 7 de marzo para que dictamine sobre la norma que Junts contribuyó a tumbar, junto a Vox y PP.
En consecuencia, el órgano de gobierno de la Cámara Baja devolvió la proposición de Ley de Amnistía a la Comisión de Justicia, otorgando un plazo de quince días naturales para aprobar un nuevo dictamen.
Así, el PSOE solicitó una prórroga de forma que contara con más tiempo para negociar con los neoconvergentes.
De este modo, una vez concedido un nuevo plazo, no se podría, en principio, solicitar otra ampliación.
Así lo establece el artículo 131.2 del Reglamento, que señala que, si una proposición de rango orgánico no recaba la mayoría absoluta, debe devolverse a la Comisión correspondiente, que “deberá emitir nuevo dictamen en el plazo de un mes”.
No obstante, en el caso de la Ley de Amnistía, como se tramita por el procedimiento de urgencia, los plazos se acortan a la mitad.
De ahí que el órgano de gobierno del Congreso, siguiendo el criterio de los letrados de la Cámara, concediera un primer plazo de quince días.
Así constaba en el informe que los servicios jurídicos redactaron, pero dejando abierta la posibilidad de prorrogar dicho límite temporal.
Pese a las protestas del PP, los votos socialistas y de Sumar han impuesto su criterio y han concedido la ampliación, por el mismo plazo inicial.
Según los populares, no procedía la extensión porque la tramitación es de urgencia. Es decir, sólo quince días, en vez del mes que establece el Reglamento.
Los socialistas han estado negociando con Junts la Ley de Amnistía
Además, temen que, al aplicarse el artículo que permite a la Mesa ampliar o reducir los plazos, se abra la posibilidad de que el PSOE vuelva a pedir otra ampliación.
Dicho esto, la Comisión de Justicia no se ha reunido en estos primeros quince días, aunque los socialistas sí han estado negociando con Junts.
Con todo, si se alcanza un acuerdo, este órgano podría reunirse antes de finalizar el nuevo plazo, emitir un nuevo dictamen y elevarlo al Pleno.
Una sesión plenaria que, apurando las fechas, podría celebrarse el 11 de marzo para el debate de la Ley de Amnistía. Si no se llegara, iría al Pleno del 18 de marzo.
De esta forma, primero se votará el nuevo dictamen y, posteriormente, la propia norma por tener carácter orgánico. Para que salga adelante, se necesitará, de nuevo, mayoría absoluta.
Tras ello, si se aprueba, pasará al Senado, donde, como ya se sabe, el PP tiene mayoría absoluta.
Por tanto, se espera que dilate al máximo la devolución de la ley a la Cámara Baja, puesto que se da por descontado que la rechazará. Eso sí, como mucho dos meses después, como establece la Constitución.