El PP no sabe –ni quiere- contener su rabia tras la investidura de Pedro Sánchez, candidato socialista, como presidente del Gobierno por tercera vez. Por eso, ha pataleado.
Al poco de acabar la votación y conocerse los resultados, una jauría al servicio de los populares ha ido señalando uno por uno a los 121 diputados socialistas por haber votado a favor de Sánchez.
Con ello, es verdad, aceptaban de facto los acuerdos alcanzados con los partidos independentistas y, por extensión, la amnistía.
Es lo que suele pasar cuando uno pertenece a un partido y comparte un proyecto político legítimo y democrático. ¿Acaso el PP esperaba otra cosa?
Después de 13 días de calles incendiadas contra el PSOE, estilo Trump, ahora la derecha extrema señala a los representantes del PSOE legítimamente elegidos en las urnas. Un ‘escrache’ virtual, aunque real.
Así, con el hastag #TodoPorLaSilla, los populares, o sus sirvientes, han ido mencionando uno a uno los perfiles en la red social X de los diputados socialistas.
“@xxxxxx, del PSOE, lo hace #TodoPorLaSilla.” A renglón seguido, un breve mensaje: “Hoy entrega sus principios y vota sí a la investidura de Pedro Sánchez a cambio de la amnistía.”
De todos es conocido que el PP sabe lo que sienten, piensan, padecen… todos y cada uno de los representantes socialistas en el Congreso. Típico de las tácticas de la extrema derecha.
Así las cosas, se puede concluir que no es una coincidencia, puesto que los populares has rastreado las cuentas de los diputados del PSOE en X. Aquí no hay casualidad, sino causalidad.
Además, tiran de hemeroteca, recordando mensajes rechazando la amnistía, como si uno no pudiera cambiar de opinión por la razón que sea.
El PP niega la mayor
Claro, los militantes y dirigentes del PP son seres de luz agraciados con la verdad, la elegancia, la sabiduría y la honestidad. Intachables. ¿Y la Gürtel? ¿Lezo? ¿Púnica?… Todo, patrañas.
No contentos con eso, a preguntas de la prensa, Alberto Núñez Feijóo, presidente de los seres de luz, sobre si apoya los señalamientos, su respuesta es de traca: “No hay ningún señalamiento”.
Además, desde la dirección de los populares explican que esos ‘escraches’ virtuales son un ejercicio de “memoria democrática”.
De hecho, se preguntan por qué les puede “incomodar” a los diputados del PSOE que se les recuerde lo que han votado.
A todo esto, el Líder Supremo de los seres de luz –Feijóo- se ha atrevido a lanzar un mensaje directo a Sánchez cuando ha ido a felicitarle por su investidura.
“Le he dicho al presidente del Gobierno que esto era una equivocación, pero él es el responsable de lo que acaba de hacer”, ha apuntado.
Así, mencionó que el Parlamento Europeo debatirá la semana que viene el impacto de la ley de amnistía en el Estado de Derecho en España.
En ese sentido, el todavía presidente del PP cree que ese hecho “es la peor forma de empezar una legislatura”. Además, a su juicio, afecta a la “reputación internacional” de España y a la democracia.
La democracia tiene estas cosas
Cabe recordar a los populares que, en democracia, lo que importa es la mayoría parlamentaria y, a veces, salen adelante votaciones que no gustan a todos.
Y, si no, que se lo digan a Guillermo Fernández Vara en Extremadura, a Ximo Puig en la Comunidad Valenciana, un par de ejemplos recientes.
O a los socialistas por la reforma exprés del Reglamento del Senado que ha consumado la mayoría absoluta de la derecha en la Cámara Alta. Ah, ahí sí que es legítima y no es una equivocación la mayoría parlamentaria.
En todo caso, será el Tribunal Constitucional quien decida sobre la constitucionalidad o no de la ley de amnistía por polémica que sea. A buen seguro que tendrá que arrojar luz con motivo de más de un recurso.
Pero, claro, ahora, el PP no controla, ni de frente ni por la puerta de atrás, la Corte de garantías. El paso siguiente, a este ritmo –y me estoy aventurando-, es que los populares deslegitimen al Constitucional si las sentencias no les gustan. Al tiempo.