De acuerdo con las proyecciones contempladas en el Programa de Estabilidad 2022-2025, se prevé la creación de 1,5 millones de empleos más hasta 2025. Además, la tasa de paro podría llegar a caer por debajo del 10%, en concreto, hasta el 9,6%.
Según el Gobierno, la reforma laboral, que se aprobó a finales de 2021, contribuirá a reducir la tasa de paro en los próximos años.
De hecho, se pretende que ya en 2022 caiga hasta el 13%, cuando en el primer trimestre se situó en el 13,6%, según la EPA.
Así, la actualización del Programa de Estabilidad 2022-2025 sitúa al mercado laboral como “uno de los principales pilares de la recuperación”. Será por la creación de puestos de trabajo y la calidad de los nuevos empleos.
Dicho programa asegura que ya se están cumpliendo algunos de los objetivos, como la caída de la temporalidad. Asimismo, de los contratos de muy corta duración y del desempleo entre los jóvenes.
Tras la entrada en vigor de la reforma laboral, los indicadores han regresado a niveles parecidos a 2008. Sin embargo, ahora, “con una estructura económica muy diferente y desequilibrios macroeconómicos en vía de corrección”.
Así las cosas, el Gobierno ve “fundamentos más sólidos” en la economía de España, citando el superávit en la cuenta corriente.
Igualmente, se ha reducido la deuda privada en un 60% desde 2008, ha caído la temporalidad y el número de jóvenes desempleados. Asimismo, la construcción ha perdido peso en el PIB.
Creación de empleos para reducir el paro estructural
Por otra parte, el Programa hace referencia a las políticas activas de empleo, que podrían incrementar el PIB de largo plazo en más del 2,1%.
La idea de las políticas activas es rebajar el paro estructural, ajustando la oferta y la demanda de empleos, incrementándose la flexibilidad.
Asimismo, el aumento de la productividad es otro de los objetivos. Precisamente, el Ejecutivo cree que habrá porcentajes positivos en la productividad por hora entre 2022 y 2025.
Además, se contendrán los costes laborales unitarios y se minimizarán las posibles pérdidas de competitividad de las exportaciones.
Por último, el Programa, que también contempla el recorte de la previsión del PIB al 4,3% para 2022, hace mención al Mecanismo RED.
Según éste, favorecerá la flexibilidad interna de las empresas, así como la recualificación de los empleados.
A su vez, impactará positivamente en términos macroeconómicos, reduciendo el desempleo estructural en 280.000 trabajadores.
Esto supone, asimismo, reducir el déficit estructural en unos 3.870 millones de euros, es decir, un 0,3% del PIB.