Decenas de civiles están siendo evacuados desde Mariúpol, concretamente de la acería de Azovstal, último enclave de la resistencia ucraniana en la ciudad.
Así lo ha confirmado el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), que participa en la operación de evacuación.
Mientras, Rusia confirma la salida de unos 80 civiles hacia la autoproclamada República Popular de Donetsk. Por su lado, otros dos grupos de 25 y 21 personas salieron hacia territorio controlado por Ucrania bajo custodia del CICR.
Estas evacuaciones han sido posibles gracias al corredor humanitario que se pactó desde el 30 de abril.
Según informa Cruz Roja, “hay en marcha una operación de paso seguro coordinada con la ONU y las partes en conflicto. El convoy para evacuar a civiles comenzó a funcionar el 29 de abril, viajó unos 230 kilómetros y llegó a Mariúpol en la mañana del sábado”.
En cambio, no se conoció hasta ahora, explica el CICR, ya que “no se ha podido compartir ninguna información hasta que la situación lo permitiera”. Podría “amenazar seriamente” la seguridad de los civiles, así como del propio convoy.
Por su lado, Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, confirmó este domingo la “evacuación de civiles de Azovstal”. “El primer grupo, de unas 100 personas, está ya dirigiéndose hacia la zona controlada”, añadió.
Así, el Ayuntamiento de Mariúpol instó a los civiles a congregarse a las 16:00 horas de este domingo en el centro comercial Port City. La evacuación se haría hacía Zaporiyia.
“Si tenéis familiares o conocidos en Mariúpol, intentad poneros en contacto con ellos por todos los medios posibles. Llamadles, enviarles mensajes de texto y decidles que pueden ir a Zaporiyia, donde estarán a salvo”, envió por su canal de Telegram.
Ya el sábado salieron los primero 20 civiles y este domingo Rusia ha informado de otros 46. Sin embargo, se calcula que aún quedan atrapadas en la ciudad alrededor de 100.000 personas.
Cabe recordar que esta localidad portuaria está bajo el asedio ruso desde hace casi dos meses. Además, las fuerzas rusas intentaron asesinar a centenares de civiles bombardeando su teatro, que servía como refugio.