El encuentro auspiciado por Santiago Abascal, presidente de Vox, para desbloquear las negociaciones en Madrid y Murcia tuvo su primer reflejo en la reunión mantenida ayer en el Congreso entre el líder del partido de ultraderecha y Pablo Casado, su homólogo del PP. Según confirmaron ambas formaciones, “siguen avanzando” en las conversaciones. Abascal quería contar también con la presencia de Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, pero desde el partido naranja insisten en circunscribir cualquier negociación al ámbito territorial.
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El dirigente popular se mostró abierto a sentarse con el líder de ultraderecha desde el primer momento con la intención de alcanzar acuerdos en Madrid y Murcia. Finalmente, el encuentro se produjo ayer. Tras él, los equipos de comunicación de ambos partidos difundieron el mismo mensaje a la prensa: “Casado y Abascal han estado reunidos en el Congreso. La reunión acaba de finalizar –era el mediodía-. Siguen avanzando en las negociaciones”, indicaron, sin aportar más detalles.
El pasado jueves, Vox bloqueó la investidura de Fernando López Miras, candidato del PP a la Presidencia de Murcia, después de intensas negociaciones en las que, finalmente, se sentó en la mesa Ciudadanos, aunque no firmó ningún acuerdo de gobierno. Ese mismo jueves, el líder popular y el ultraderechista estuvieron reunidos en Madrid, al igual que Iván Espinosa de los Monteros, portavoz parlamentario de Vox, y José Manuel Villegas, que confirmó que, por el momento, no iban a suscribir pacto alguno con la formación de extrema derecha.
Después de consumarse el bloqueo del Gobierno murciano, Vox amenazó con extrapolar el modelo a Madrid, donde también son necesarios sus votos para sacar adelante la investidura de Isabel Díaz Ayuso, candidata del PP a presidir la Comunidad madrileña.
Lo ve usted señora Monasterio, si después del lío de Murcia, el señor Abascal después de bloquear en Murcia al PP, amenazó con extrapolar el modelo a Madrid, para que Isabel Diaz Ayuso del PP no pueda sacar adelante su investidura, hágale caso al líder de su partido, que además de ser lo que corresponde, es una buena idea.