Nadia Calviño, ministra de Asuntos Económicos en funciones, presentó el pasado viernes su candidatura a presidir el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
En ese sentido, este sábado, la también vicepresidente primera del Gobierno en funciones, ha señalado que la decisión revela que España “hace una apuesta fuerte”.
Ante “el calibre del resto de los competidores”, explicó, “el presidente Sánchez y yo vimos claramente que solamente una candidatura con mi nombre tenía las máximas opciones para prosperar, que cualquier otro candidato. Cualquier otro perfil sería dar la batalla por pérdida”.
Así lo ha manifestado en declaraciones a la prensa en Cádiz. Asimismo, se ha mostrado convencida de la fortaleza que supone poner su nombre sobre la mesa.
Se traduce en, dijo, “»una candidatura fuerte que da a nuestro país las máximas opciones para tener éxito”. A su vez, conseguir para España “por primera vez en nuestra historia la presidencia del Banco Europeo de Inversiones”. Además, sería la primera mujer en presidir el BEI.
De este modo, ha anotado que para ella es “un honor” que “haya presentado mi nombre”. Al mismo tiempo, ha descrito al organismo como “una institución estratégica” para nuestro país y Europa por su importancia en la financiación de inversiones. Tanto públicas como privadas y de grandes proyectos.
Su candidatura al BEI no afectará a sus funciones en el Gobierno
Ahora, tras la presentación de la candidatura, se llevarán a cabo las votaciones en otoño. Si tiene éxito, “el nuevo puesto sería asumido en enero de 2024”.
En todo caso, Calviño ha insistido en que “esta candidatura no interfiere en absoluto con mis funciones como vicepresidenta primera”.
Algo para lo que “el presidente Sánchez ha expresado claramente su confianza, y yo mi compromiso con él”.
Es decir, explicó, “seguir liderando, dirigiendo y coordinando la política económica del gobierno en los próximos meses y en la siguiente legislatura”.
Asimismo, subrayó que sus funciones en el Ejecutivo “se desarrollarían hasta final de año, no sólo en las próximas semanas en un gobierno en funciones”. También, dijo, “en el nuevo gobierno de Pedro Sánchez en esa nueva legislatura”.
Así las cosas, presidir el BEI, valoró la ministra, “por primera vez en nuestra historia” es la guinda al “esfuerzo que durante cinco años ha llevado a que España tenga una voz fuerte, una gran influencia, el respeto y el cariño de la comunidad internacional”.
Reflejo de la política económica de los últimos cinco años
A ese respecto, apuntó que “estamos poniendo a nuestro país en el papel que le corresponde como cuarta economía de la Unión Europea”, enfatizó.
Igualmente, Calviño describió la fortaleza de su candidatura como la expresión “del resultado de la política económica que hemos llevado durante estos cinco años”.
“Un resultado positivo, reconocido por todos los organismos internacionales, públicos y privados”, apostilló. “Todos los datos económicos avalan la gestión que hemos desarrollado”, ha enfatizado.
A ello se une el “perfil internacional” de la vicepresidente para poder dirigir los destinos de la institución. De igual modo, su “experiencia previa en otros organismos internacionales”.
Entre ellos, “la presidencia del principal órgano asesor del Fondo Monetario Internacional”.
De ahí que digan que “sólo una candidatura con mi nombre podía dar a España las máximas opciones para este puesto de primer nivel en el ámbito europeo”.
En cualquier caso, Calviño llama a que “la lectura que hay que hacer es una lectura positiva”. “Esto lo que refleja es el respeto, el cariño, el papel, el prestigio que hemos tenido”, concluyó.