Con el incremento de los tipos de interés en 25 puntos básicos, el Banco Central Europeo (BCE) elevó este jueves el precio del dinero al 4,5%. Igualmente, la tasa de depósito alcanza el 4% y la facilidad de préstamo, el 4,75%.
De este modo, la autoridad del euro sube los tipos a su cota más alta en más de dos décadas. Así, continúa en la línea de endurecimiento de su política monetaria, aunque el precio del dinero podría haber alcanzado su techo.
En un comunicado, el BCE apunta que “la subida de tipos de hoy refleja la valoración del Consejo de Gobierno de las perspectivas de inflación a la luz de los nuevos datos económicos y financieros, la dinámica de la inflación subyacente y la fortaleza de la transmisión de la política monetaria”.
A su vez, el instituto emisor asegura que los tipos “han alcanzado niveles que, de mantenerse por un tiempo lo suficientemente prolongado”, ayudarán a devolver la inflación al entorno del 2%.
De esta forma, el precio del dinero ha subido en 450 puntos básicos desde que en julio de 2022 comenzara los incrementos de tipos.
Además, el BCE explica que los anteriores aumentos “siguen transmitiéndose con fuerza”.
Asimismo, las condiciones de financiación se han endurecido lo suficiente para frenar la demanda, “un factor importante para que la inflación vuelva al objetivo”.
Por tanto, el organismo que dirige Christine Lagarde cree que la inflación media se sitúe en 2023 en el 5,6%. Tras ello, se moderará al 3,2% el próximo año y al 2,1% en 2025.
Respecto a la subyacente, la revisión también ha sido “ligeramente a la baja”, situándola en el 5,1% en este año. Posteriormente, bajará al 2,9% y al 2,2% en 2024 y 2025, respectivamente.
De otra parte, calcula que el PIB de la zona euro crecerá en 2023 un 0,7%, para expandirse un 1% al año siguiente y acelerar al 1,5% en 2025.
Estos niveles considerablemente a la baja se deben, según el BCE, al impacto de la política monetaria dura sobre la demanda doméstica. Asimismo, a un debilitamiento del comercio internacional.