Los combates continúan en Sudán pese al alto el fuego en vigor y el acuerdo entre ambos bandos para prorrogarlo una semana más.
Según el Ministerio de Exteriores sursudanés, Abdelfatá al Burhan, jefe del Ejército de Sudán, y Mohamed Hamdan Dagalo, líder de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), han aprobado “en principio” una tregua del 4 al 11 de mayo.
Así, el acuerdo llegaría después de una conversación telefónica con Salva Kiir, presidente de Sudán del Sur. En un comunicado, destaca la importancia de lograr un “alto el fuego duradero” en el país.
Asimismo, destacó la necesidad de nombrar representantes y avanzar en un proceso de negociación para la paz.
De acuerdo con el documento, ambas partes ha accedido a esto último y nombrarán representantes. Además, Kiir ha propuesto marcar un plazo para que den comienzo las conversaciones de paz.
En ese sentido, se ha referido a que “la situación humanitaria en Jartum, que se está deteriorando rápidamente, requiere a los líderes reducir las hostilidades”.
Al mismo tiempo, ha llamado a ambas partes a “utilizar debidamente la tregua de siete días”.
Sudán del Sur, mediador
Ante ello, las autoridades de Sudán del Sur han resaltado que siguen “comprometidos con la búsqueda de un acercamiento entre las partes”.
Todo ello, “con la vista puesta en un alto el fuego duradero y un cese de las hostilidades que allane el camino para un acuerdo político amistoso”.
Asimismo, el presidente sursudanés ha agradecido “a los socios a nivel internacional a la hora de prestar ayuda al pueblo sudanés, especialmente ante el flujo de refugiados”.
El conflicto interno en Sudán comenzó el pasado 15 de abril por las discrepancias entre los dos líderes. En el centro de la discusión, el papel que jugarán las RSF en el futuro Ejército del país.
Pese a los continuos alto el fuego, el balance de muertes sigue siendo una incógnita. El balance oficial de Naciones Unidas apunta a 413 muertos y más de 3.500 heridos.
Sin embargo, las autoridades sanitarias del país creen que el número de muertes se eleva a más de 600, así como más de 5.000 personas heridas.
Lo que sí se puede constatar es que unas 100.000 personas han huido de los combates yendo hacia el norte. Su intención es cruzar a Chad.