Este jueves, Pedro Sánchez, jefe del Ejecutivo, y Pere Aragonès, presidente de la Generalitat, se reunieron para abordar “cuestiones de interés” ciudadano.
Así, alcanzaron varios acuerdos para avanzar en la normalización de las relaciones, aunque el punto de discordia sigue siendo el referéndum de autodeterminación.
Mientras que Sánchez insiste en que no hay posibilidad alguna de llevar a cabo la consulta, Aragonès lo defenderá en la mesa de diálogo. Un encuentro entre ambos gobiernos que se convocará en el primer trimestre de 2024.
De este modo, la reunión que se ha celebrado en Barcelona cumple uno de los requisitos que ERC puso como condición para apoyar la investidura.
Además, convocar la mesa de diálogo es uno de los cinco acuerdos que han alcanzado en el Palau de la Generalitat.
Por otro lado, en ese próximo encuentro se añade aprobar una ley orgánica que garantice el plurilingüismo. De esa forma, todo ciudadano podrá dirigirse a la Administración Central en cualquiera de las lenguas cooficiales.
Asimismo, han acordado traspasar la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV). También, impulsar y financiar la instalación de un centro tecnológico de producción de chips en Cataluña.
Por último, han acordado desarrollar a partir de enero el pacto y un calendario para el traspaso de Rodalies.
Aragonès seguirá defendiendo una consulta de autodeterminación
En todo caso, quedó patente la distancia que separa a ambos dirigentes acerca del referéndum de autodeterminación que defiende el jefe del Gobierno catalán.
El presidente de la Generalitat mostró en rueda de prensa su convicción de que rebajará la “posición de máximos” de Sánchez.
“Reiteraremos la necesidad de hablar de las bases y negociación del referéndum y de las vías para hacerlo posible”, sostuvo.
Tal es así que avanzó que uno de los componentes que planteará es un informe de expertos académicos en cuanto a un acuerdo de claridad.
Sigue, de este modo, la vía de Canadá y Quebec en el que se fijaban las condiciones para una hipotética consulta. “Esos materiales son una buena base para trabajar”, ha apuntado.
Por su lado, el jefe del Ejecutivo central insistió en que la defensa del referéndum es también una posición de máximos sin futuro.
Sánchez pide acuerdos transversales
En su rueda de prensa, explicó que esta consulta no cabe en la Constitución y que sólo es posible avanzar en el autogobierno.
No obstante, señaló que no pide a ningún partido que renuncie a sus objetivos, pero que lo haga en el marco constitucional.
En todo caso, reiteró, “no hay ninguna constitución en el mundo que acepte y asuma la segregación de una parte de su país. No lo hay tampoco en España. Por tanto, desde el punto de vista material, no está contemplado”.
Sin embargo, considera que hay que ir más en la línea de acuerdos transversales que respeten la mayoría de una sociedad plural como la catalana.
De ahí que Sánchez hiciera un llamamiento a ofrecer acuerdos y no confrontación.
Para terminar, se ha ratificado el compromiso de investidura de asumir el 20% de la deuda viva de la Generalitat.
Al mismo tiempo, el presidente recordó que el Ejecutivo se comprometió a negociar condonar la deuda a todas las comunidades que lo pidan.
Por último, señaló que el Estatut contempla una Agencia Tributaria propia, un tema que aún se tiene que desarrollar.