Por noveno mes consecutivo la inflación de la industria cayó en su tasa interanual, según el Índice de Precios Industriales (IPRI) del Instituto Nacional de Estadística (INE).
En concreto, los precios de la industria descendieron un 7,4% en noviembre, comparando con el mismo mes de 2022.
Durante el periodo de expansión –26 meses– previo a los descensos, llegó a situarse durante más de 20 meses en tasas positivas de dos dígitos.
De este modo, los precios industriales bajaron debido principalmente al aumento de la energía, que creció cuatro décimas, hasta el -23%.
Así, este crecimiento se debió al descenso de los precios de la producción de gas y distribución por tubería de combustibles gaseosos, menor que la de noviembre de 2022.
Asimismo, contribuyeron los bienes de consumo no duradero, cuya tasa se contrajo casi un 1%, situándose en el 7,5%. Esto se debió a la estabilidad de los precios de fabricación de productos lácteos, cuando hace un año subieron.
De igual modo, por el incremento de los precios de fabricación de aceites y grasas vegetales y animales, un aumento menor que el año pasado.
Por otro lado, hablando en tasa mensual –noviembre sobre octubre-, los precios industriales cayeron un 2%, siendo el mayor descenso mensual desde marzo.
Detrás de esta contracción mensual se encuentra el retroceso de la energía, que bajó un 6,4%. Esta circunstancia se originó en el menor coste del refino de petróleo y de la producción de gas y energía eléctrica.
Por comunidades autónomas, todas mostraron retrocesos, siendo los mayores descensos de los precios industriales en Asturias y Baleares, ambas con un 16,5%.
Le siguen Canarias (-13,6%) y Madrid (-11,6%), además de, también con dos dígitos, Cantabria (-10,9%).
Al lado contrario, las menores inflaciones de la industria se registraron en Extremadura (-2,8%), Navarra (-3,5%) y La Rioja (-3,9%).
El resto de regiones se mantuvieron en una horquilla que va desde el -9,7% del País Vasco, en la zona alta, al -4,7% de Comunidad Valenciana, en la zona baja.