La sospecha de Anticorrupción sobre que Mariano Rajoy tenga una “posible responsabilidad” en la Operación Kitchen ha tenido reacción en el PP. O mejor dicho, ha tenido una no reacción.
Cuca Gamarra, portavoz de los populares en el Congreso, optó ayer por guardar silencia acerca de lo expuesto por los fiscales. César de Rivas y Miguel Serrano han formulado un recurso en contra de la decisión del juez Manuel García-Castellón de cerrar la investigación de esta pieza de la trama Tándem.
Según Anticorrupción, es necesario investigar los indicios que señalan a Rajoy. Además, pide que se vuelva a imputar a María Dolores de Cospedal en el caso que investiga el espionaje a Luis Bárcenas, extesorero del PP.
Gamarra, ante la pregunta al respecto, se limitó a decir que su partido es “absolutamente respetuoso” con las resoluciones judiciales. Sin embargo, no ha ido más allá.
Recordó que desde Génova se estableció hace meses no pronunciarse acerca de las decisiones de los jueces. Si estos fallaran a favor del PP, seguro que sí se pronuncian.
Así, la portavoz parlamentaria ha logrado eludir manifestarse acerca de este asunto concreto del ex presidente del Gobierno. De este modo, también, deja a Rajoy al borde del abismo y a merced de la Fiscalía Anticorrupción. Salvo que el magistrado de la Audiencia Nacional decida desoír las peticiones de los fiscales De Rivas y Serrano.
Precisamente, el ex presidente tiene pendiente comparecer ante la comisión de investigación en la Cámara Baja. La previsión es que en las próximas semanas se retomen las comparecencias.
Por otro lado, Gamarra tampoco se ha pronunciado acerca de la previsible pugna para dirigir el PP de Madrid entre Isabel Díaz Ayuso y José Luis Martínez-Almeida.
La presidente de la Comunidad de Madrid ya se ha postulado para asumir el liderazgo de los populares. En cambio, aunque Almeida había descartado por ahora hacerlo, podría estar en su pensamiento disputar la presidencia con Ayuso.
Más aún después de Pablo Casado, presidente del PP, señalara en una entrevista que hay “dos militantes de mucho peso”, en alusión a ambos. Sin embargo, evitó inclinarse públicamente por alguno de ellos.