Operación ‘Libertad’: centenares de víctimas de explotación sexual rescatadas por la Interpol

Operación 'Libertad': centenares de víctimas de explotación sexual rescatadas por la Interpol

Se llevó a cabo en 13 países de América Latina y el Caribe.
En una operación denominada Libertad, coordinada por Interpol, unas 350 posibles víctimas de explotación sexual y trabajos forzados fueron liberadas en 13 países de América Latina y el Caribe, saldándose con, al menos, 12 personas detenidas. La coordinación se realizó desde Barbados y han participado las autoridades de Antigua y Barbuda, Aruba, Belice, Brasil, Curazao, Guyana, Jamaica, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago, Islas Turcas y Caicos y Venezuela. A través de un comunicado, la Interpol ha informado de que más de 500 agentes se desplegaron en prostíbulos, explotaciones agrarias, fábricas, minas y mercados callejeros con el fin de combatir la trata de personas en una reunión en la que miles de hombres, mujeres y niños buscaban desesperadamente una oportunidad.
Cem Kolcu, coordinador de la Unidad de Interpol para la lucha contra el tráfico y la trata de personas, advierte de que las mafias no informan a las víctimas de las condiciones que encontrarán en sus destinos finales: “Hemos encontrado a mujeres obligadas a trabajar en espacios del tamaño de un ataúd”. Así, en Guyana se encontraron a mujeres jóvenes que eran forzadas a ejercer la prostitución junto a minas en zonas remotas, de forma que no pudieran escapar. Diana O’Brien, responsable del Ministerio de Seguridad Pública, reconoció la dificultad de actuar cuando se trata de “lugares aislados”. Otro aspecto que complica las investigaciones es que algunas víctimas nos identifican como tal simplemente porque ganan algo más de dinero del que ingresarían en sus países vecinos. Otras, sin embargo, se ven manipuladas o intimidades con información falsa, de forma que no acuden a las autoridades y denuncian sus casos.
En otros, quedan a merced de sus captores porque, como les sucedió a los empleados asiáticos de una fábrica en San Vicente y las Granadinas, se vieron obligados a entregar sus pasaportes a las mafias, no tenían sueldo y eran dependientes para disponer de vivienda o comida. Tim Morris, director de Servicios Policiales de la agencia internacional de policía, señala que “operaciones como esta muestran el poder de Interpol como plataforma para los 13 países participantes. No obstante, subraya la historia humana que se oculta detrás de operaciones de este tipo: “Se trate de una madre, un padre, un hermano, una hermana, un hijo o una hija, hay una historia personal muy intensa que habitualmente va ligada a mucho sufrimiento”.

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