Según la Inteligencia ucraniana, Rusia barajó la posibilidad de matar a Yevgeni Prigozhin, líder del Grupo Wagner, después de la fallida rebelión.
Así, Kirill Budanov, jefe de los servicios de Inteligencia de Ucrania, ha señalado que “de una forma u otra, todos los posibles intentos de asesinato no hubieran sido rápidos. Necesitarían tiempo para desarrollar propuestas apropiadas y llegar al punto en el que estén listos para una operación a gran escala”.
En ese sentido, Budanov todavía ve posible que Moscú lo intente. “Me gustaría enfatizar que esta es un gran pregunta que queda abierta. ¿Lo llevarán a cabo? ¿Se atreverán a llevar a cabo esta orden?”, ha dicho en una entrevista con el periodista Howard Altman.
Asimismo, el jefe de los servicios secretos ucranianos admitió que sintió gran regocijo al saber de los intentos de rebelión de Prigozhin. Además, ha desvelado que Ucrania tenía conocimientos de ello.
Por otro lado, Budanov confía en que, pese a que el alzamiento se sofocó rápidamente, haya podido infligir “algo de daño” a las tropas rusas.
A su vez, considera que los mercenarios no volverán a Ucrania como un grupo independiente.
“No esperamos que Wagner aparezca en Ucrania como una entidad separada que realiza sus propias operaciones y creo que eso es muy importante”, apuntó.
Al mismo tiempo, afirmó que si Prigozhin hubiera llegado a entrar en el recinto del Kremlin, se lo habría encontrado vacío.
Vladimir Putin, presidente de Rusia, y sus ministros ya habían abandonado el complejo, asegura Budanov.
De este modo, el líder de los paramilitares demostraría, según la versión del jefe de la Inteligencia ucraniana, que no hay poder en Rusia.
En ese sentido, señaló que “no hay ministros, no hay funcionarios de verdad allí. Todos han huido, y el habría demostrado que no hay poder en Rusia ahora mismo”.
Augura, asimismo, que las autoridades de San Petersburgo y de otras ciudades tratarían de asumir el mando.
“Empezarían a afirmar que son las autoridades legítimas, lo que crearía una situación de dos autoridades en el país, que se dividiría de inmediato”, garantiza.
En todo caso, el fin de la rebelión de Wagner sólo ha dado “algo de tiempo” a Putin, ha aseverado.