Hasta 133 migrantes subsaharianos han conseguido entrar en Melilla en la mañana de este viernes después de romper la puerta de control del Barrio Chino.
Pertenecen a un grupo de más de 500 personas que utilizaron una cizalla para luego saltar por el tejado e intentar llegar a la ciudad.
Así, esta entrada masiva ha dejado 49 guardias civiles heridos leves, así como 57 migrantes. Tres de ellos tuvieron que acudir al hospital para que los atendieran.
Es la primera importante que se produce en Melilla desde que se normalizaron las relaciones entre España y Marruecos después del cambio de la postura de Pedro Sánchez acerca del Sáhara Occidental.
Además, se produce unos días antes de que arranque la Cumbre de la OTAN en Madrid, que se celebrará el 29 y 30 de junio. Precisamente por esta razón, se han elevado las medidas de seguridad.
Según la Delegación del Gobierno, alrededor de 2.000 migrantes subsaharianos se encontraban en los alrededores del monte Gurugú.
De ellos, unos 500 se acercaron hacia la ciudad española alrededor de las 6:40 horas. En ese momento se activó la alarma anti-intrusión de la Comandancia de la Guardia Civil.
Unas dos horas después intentaron acceder a Melilla, de los cuales 133 lo consiguieron dicen los derivó al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI). Todos son varones y, aparentemente, mayores de edad.
Como consecuencia del asalto, cuatro vehículos del Instituto Armado sufrieron daños en la carrocería y rotura de lunas.
El grupo de subsaharianos estaba “perfectamente organizado” y era “violento”, señala Delegación del Gobierno.
A su vez, destaca el “amplio dispositivo desplegado por las fuerzas de seguridad marroquíes, en coordinación con las Fuerzas de Seguridad del Estado” españolas.
Por último, reseñar que el dispositivo policial lo integraba, por parte de la Guardia Civil, un helicóptero y siete patrullas de seguridad.
Asimismo, tres patrullas de la compañía Fiscal, tres equipos MIR y un dron. Por parte de la Policía Nacional, cuatro patrullas y dos furgonetas de la UIP.
También la Policía Local ha participado con dos patrullas, cortando las carreteras con el fin de garantizar la seguridad de los ciudadanos.