La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha elevado el número de casos de viruela del mono (Monkeypox) a más de 3.200 en el mundo.
Así lo ha trasladado Tedros Adhanom Ghebreyesus, su director general, en su discurso en el Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario Internacional. Asimismo, ha confirmado una muerte.
Tedros ha señalado que la mayoría los casos son de hombres que tienen sexo con hombres. Además, ha detallado que dichas relaciones sexuales ha sido con nuevas parejas o múltiples.
“La transmisión de persona a persona continúa y es probable que se subestime. En Nigeria, la proporción de mujeres afectadas es mucho mayor que en otros lugares”, apuntó. “Es fundamental comprender mejor cómo se propaga la enfermedad allí”, añadió.
Asimismo, en lo que llevamos de año, se han notificado casi 1.500 casos de viruela del mono sospechosos y unas 70 muertes en África Central.
Sobre todo se han dado en la República Democrática del Congo, pero también en la República Centroafricana y en Camerún.
No obstante, según advirtió, “pocos de estos casos están confirmados y se sabe poco sobre sus circunstancias”.
Por otro lado, el director general de la agencia de la ONU ha pedido que los países compartan la información con la OMS.
Igualmente, que detecten casos, lleven a cabo rastreo de contactos y secuencial el genoma. Además, que adopte medidas de control de prevención y control de infecciones, así como que fortalezcan sus capacidades para prevenir la transmisión.
Se han perdido ocasiones para identificar casos de viruela del mono
A su vez, dijo que “es probable que muchos países hayan perdido oportunidades para identificar” casos de viruela del mono.
Eso incluye “casos en la comunidad sin ningún viaje reciente. El objetivo de la OMS es ayudar a los países a contener la transmisión y detener el brote con herramientas de salud pública probadas y comprobadas”.
Esto supone incluir “vigilancia, rastreo de contactos y aislamiento de pacientes infectados”, abundó.
En ese sentido, Tedros recordó que una de las lecciones “más importantes” de la pandemia de coronavirus es trabajar en estrecha colaboración”.
Es, dijo, una de las formas “más efectivas” para responder a los brotes en las comunidades afectadas y, así, crear conjuntamente comunicaciones de riesgo efectivas.
Al respecto, señaló que se necesita “trabajar con socios, incluidas las comunidades afectadas”. Se trata de “abordar el estigma, la discriminación y la desinformación de manera rápida y decisiva”, apuntó.
“También debemos trabajar juntos como comunidad internacional para generar los datos necesarios sobre eficacia clínica y seguridad sobre vacunas y terapias contra la viruela del mono, y para garantizar su distribución equitativa”, concluyó.