En los once meses que llevamos del año, se han creado 510.444 empleos nuevos, uno de los mayores incrementos de la serie en ese periodo.
Por tanto, la ocupación, descontando la estacionalidad y el efecto calendario, se sitúa en 20.751.338 trabajadores.
Así, se trata del nivel más elevado de la serie y uno de los mejores comportamientos del empleo para el periodo de enero a noviembre.
Además, comparando con octubre, el aumento de la ocupación es de 10.350 afiliados, según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Por otro lado, la filiación media se ha situado en 20.806.074, la más elevada de la serie original en un undécimo mes del año.
Asimismo, en la serie diaria, el número de cotizantes se mantuvo por encima de los 20,8 millones de afiliado de un modo continuado del 15 al 29 de noviembre.
A su vez, se registraron 11.583 menos empleos, lo que supone un retroceso, aunque menos pronunciado como el de 2016 y 2019. Entonces, la marca fue de -36.000 de media.
En tasa interanual, la afiliación ha crecido un 2,6%, lo que traduce en 522.443 personas más trabajando en noviembre respecto a hace un año.
Por su parte, la afiliación media de las mujeres continúa en niveles históricos, con más de 9,8 millones de cotizantes femeninas. Es decir, que las mujeres representan ya el 47,2% del total de afiliaciones.
En palabras de Elma Saiz, ministra del ramo, “el mercado laboral muestra un notable dinamismo a lo largo de 2023, con un nuevo aumento del empleo en noviembre. Destaca el buen comportamiento de la afiliación a la Seguridad Social entre las mujeres”.
Mejora de la calidad y la estabilidad de los empleos
“Gracias a la reforma laboral, España está mejorando intensamente la calidad y la estabilidad de los trabajos, con una fuerte reducción de la temporalidad -especialmente entre los jóvenes- y un buen comportamiento en actividades de alto valor añadido”, ha añadido.
De este modo, comparando con los niveles previos a la pandemia, el empleo femenino también muestra un especial dinamismo.
Tal es así que crece un 3% más que el de los hombres en el promedio enero-noviembre. De hecho, en tasa interanual, la afiliación femenina crece un 3,06%.
Esto es un 0,9% más que la de los hombres y, como resultado, hay más de 9,8 millones de mujeres trabajando.
Por sectores, mirando también a antes de la pandemia, especialmente intenso es el crecimiento de la filiación en los alto valor añadido.
Es decir, como el de la Informática y Telecomunicaciones, cuyo número de empleos nuevos ha aumentado un 24,8%.
También el de Actividades Profesionales, Científicas y Técnicas, que presenta un crecimiento del 15,5%. Desde el fin de la pandemia, uno de cada cinco nuevos afiliados (308.000 en términos absolutos) se ha incorporado a estos dos sectores altamente productivos.
Más contratación indefinida
Para terminar, la reforma laboral entró en vigor hace 22 meses. Después de este tiempo, se constatan sus efectos positivos en la estabilización del empleo y la mejora de su calidad.
En conjunto, ahora hay 3.131.388 afiliados más con contrato indefinido que en diciembre de 2021, último mes antes de la entrada de la reforma.
Además, en noviembre, el porcentaje de cotizantes con contrato indefinido se sitúa en el 87%, su máximo histórico.
Crece, por tanto, un 17% desde la reforma laboral. Así, la tasa de temporalidad se mantiene en el mínimo (el 13%).
En el caso de los menores de 30 años, la reducción del nivel de temporalidad es más intensa, bajando un 32% (del 53% al 21%) respecto al nivel que tenía antes de la reforma.