Después de que seis países de la UE hayan aceptado acoger a los migrantes a bordo del Ocean Viking, Malta permite el desembarco las 356 personas rescatadas. Así lo ha anunciado Joseph Muscat, primer ministro maltés a través de Twitter.
“Tras discusiones con la Comisión Europea y varios Estados miembro, principalmente Francia y Alemania, Malta ha accedido a ser parte de la solución del punto muerto del Ocean Viking, que tiene a 356 personas a bordo, sin prejuicio de su postura legal”, reza el mensaje. “Malta trasladará a estas personas a barcos de las Fuerzas Armadas maltesas fuera de las aguas territoriales y los llevara a tierra”, detalló.
De acuerdo con el pacto alcanzado, “todos los migrantes serán trasladados a otros estados miembros”, en concreto, Alemania, Francia, Irlanda, Luxemburgo, Portugal y Rumanía. Remarcó que “ninguno se quedará en Malta”.
150 de los migrantes “serán acogidos en los próximos días” por Francia, según ha confirmado Christophe Castaner, ministro de Interior francés, quien ha añadido que su país “mantiene su solidaridad”. En un mensaje en Twitter, Castaner ha dado las gracias a las autoridades maltesas y al comisario europeo de Migraciones: “juntos hemos conseguido forjar una solución europea”, destacó.
También en Twitter, Dimitris Avramopoulos, comisario europeo de Migraciones, Interior y Ciudadanía de la Unión Europea, ha aplaudido el acuerdo y ha pedido que se haga lo más rápida posible la reubicación de los migrantes: “Estos compromisos deben ser cumplidos y materializados rápido”, reza su mensaje.
Por su lado, Médicos Sin Fronteras ha subrayado en su Twitter que “tras 14 días de sufrimiento innecesario, las 356 personas a bordo del Ocean Viking finalmente desembarcaban en Malta”. Con todo, aplauden la solución, pero reivindican que “aunque algunos estados de la UE finalmente han ofrecido una respuesta humana a este desastre humanitario en el mediterráneo, es necesario mecanismo de desembarco predecible ya”.
Por su lado, SOS Mediterranée, la otra ONG que intervino, ha manifestado su “alivio”. “Se ha prometido un mecanismo de desembarco europeo y previsible. Debe ser puesto en marcha”, ha sostenido.