Un solo concejal más es suficiente y necesario para que Manuela Carmena, alcaldesa de Madrid, revalide como primera edil de la capital, según indica la media de las encuestas, que otorga a la candidata de Más Madrid 20 concejales. Con 21 volvería a ser alcaldesa. Y es en esa línea en la que se ha mantenido Carmena durante una entrevista, ayer, en la Cadena SER, junto a Iñigo Errejón, candidato por la plataforma a la Presidencia de la Comunidad de Madrid.
Así, la alcaldesa señaló que “no va a tocar los impuestos” si gana las elecciones. Lo fundamenta en que se ha logrado un equilibrio en las cuentas y “manteniendo la imposición hemos reducido la deuda el 54%”. Además, defiende continuar aplicando “deducciones importantes” para los pequeños comerciantes y las empresas culturales. De ahí la importancia de concentrar el voto de la izquierda madrileña en su propuesta.
Además, Carmena se compromete a poner más medios a disposición de la lucha contra la burbuja del alquiler, construyendo mil viviendas al año. “Tenemos ahora en construcción más de 3.000 viviendas. Y queremos ceder 30 parcelas para que los empresarios hagan viviendas de alquiler social”, indicó. Con 5.000 votos más de los que otorgan a la primera edil madrileña las encuestas, estas propuestas podrían llevarse adelante, al conservar el bastón de mando.
La alcaldesa se lamentó de que en el debate de anteayer, en Telemadrid, de los candidatos a la Alcaldía madrileña le fuera “imposible rendir cuentas” a los ciudadanos de su gestión a causa del formato porque éste “no permitió profundizar” en los asuntos y se convirtió en una repetición de “eslóganes sin sentido”.
Además, Carmena compartió con Errejón la opinión de aceptar que Inditex financie tecnología punta para los hospitales de Madrid, algo que los dirigentes de Unidas Podemos rechazan y que ha provocado gran polémica, “siempre que estén a cuenta del pago de sus impuestos”, matizó el candidato de Más Madrid a la Presidencia de la Comunidad.
Con él también coincidió, la alcaldesa, en la necesidad de recuperar las relaciones entre el Gobierno de la región y el Ayuntamiento de la capital, que llevará a una mejora de la movilidad ciudadana al haber más inversiones en los medios de transporte –Metro y Red de Cercanías- y la construcción de “ocho intercambiadores” con aparcamientos disuasorios. Solo la obtención de un concejal más separa que la alcaldesa revalide y se apuntalen sus proyectos y, sobre todo, el consistorio madrileño no vuelva a caer en manos de la derecha.