Según ha informado la Guardia Revolucionaria de Irán, un “dron espía estadounidense” habría violado el espacio aéreo de la República Islámica, por lo que ha sido derribado. Por su parte, portavoces militares de Estados Unidos han reconocido que uno de estos aparatos se les había perdido, asegurando que lo tenían localizado “en el espacio aéreo internacional sobre el estrecho de Ormuz”. Con este incidente se ha reavivado el fuego de las controversias existentes entre Washington y Teherán. Por el momento, el precio del petróleo se ha disparado al alza.
“El derribo del dron (norte) americano es un claro mensaje a América (de que) nuestras fronteras son la línea roja de Irán y que reaccionaremos enérgicamente contra cualquier agresión”, ha avisado el general Hosein Salami, jefe de la Guardia Revolucionaria, nombrado por PressTV. “Irán no está buscando una guerra con ningún país, pero estamos plenamente preparados para defender la patria”, ha manifestado el militar. Por su parte, Donald Trump, presidente de Estados Unidos, ha dado como respuesta un escueto mensaje en Twitter: “Irán ha cometido un error muy grave”.
Hace dos meses EEUU incluyó en su listado de organizaciones terroristas, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica, también conocido como Pasdarán que es un ejército paralelo a las Fuerzas Armadas.
Según ha asegurado la Guardia Revolucionaria, sus fuerzas aéreas derribaron un dron espía de modelo Global Hawk el cual “se había infiltrado sobre la provincia costera de Hormozgán, en el sur del país”. En cambio, los portavoces de Estados Unidos han insistido en que el dron (un MQ-4C Triton de la Marina, según ha trasladado una fuente de Reuters) se encontraba en el espacio aéreo internacional, en el estrecho de Ormuz, lugar donde precisamente estaba cuando un misil tierra-aire lo derribó. El estrecho de Ormuz es un paso estratégico para el transporte de petróleo y gas, entre el golfo Pérsico y el golfo de Omán.
La tensión crece entre ambos países, más aún con el empeño de Trump de aislar a Teherán.