En la madrugada del 31, a las 2:00 volverá a ser las 3:00.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Isabel Celaá, ministra portavoz del Gobierno, ha explicado que el Ejecutivo y la Unión Europea han tomado la decisión de posponer hasta 2021 cualquier determinación acerca del cambio de hora y tener en el año dos horarios, el de verano y el de invierno.
Se había encargado un estudio acerca de la reforma de la hora oficial, pero no se han obtenido «conclusiones concluyentes». El pasado año se había decidido terminar con la actual práctica, a raíz de lo cual se inició una polémica de cuál era el mejor horario, si el de invierno, por el que anochece antes, o el de verano, que alarga las horas de sol.
Dicho estudio finalizó sin conclusiones. Lo cierto es que la modificación «tendrá importantes repercusiones económicas y culturales”. Así lo ha explicado Celaá, que señaló que los expertos entienden que es más conveniente mantener el horario de invierno durante todo el año. En cambio, el CIS lo consultó con los españoles, que eligieron el horario de verano mayoritariamente. En consecuencia, y ante la falta de acuerdo, la decisión final ha sido pospuesta hasta 2021. Cosas de la democracia social.
Por el momento, el día 31 a las 2:00 seguirán siendo las 3:00; una hora menos para quienes tengan puesto el despertador y una hora más de sol vespertino para todos. Vamos… como hasta ahora.