El Gobierno ha aprobado un subsidio extraordinario para todos los parados sin prestación entre el 14 de marzo y el 30 de junio. Es decir, durante el primer estado de alarma por la crisis ocasionada por el coronavirus.
La cuantía asciende a 430 euros y ha sido impulsada por Trabajo. Esa cantidad, además, se cobrará durante tres meses. Se trata de una ayuda para quienes en ese tiempo no han encontrado trabajo y no tienen derecho al Ingreso Mínimo Vital.
La cuantía será el 80% del Indicador Público de Renta de Efectos Multiples (IPREM). Esos 430 euros, durante 3 meses y podrían llegar a unos 250.000 parados sin prestación.
Para acceder a esta ayuda especial, los solicitantes deben haber agotado todas sus prestaciones (contributivas, asistenciales, Renta Activa de Inserción) entre el 14 de marzo y el 30 de junio. Además, deberán estar en desempleo e inscritos como demandantes de empleo en el Servicio Público de Empleo (SEPE).
Dichas ayudas estarán gestionadas por este organismo y no serán compatibles con la percepción de renta mínima, de inclusión, salario social, o cualquier ayuda análoga de cualquier administración pública.
El Consejo de Ministros también ha aprobado un subsidio de desempleo para el personal técnico o auxiliar en eventos u obras culturales con el que esperan llegar a más de 10.000 parados sin prestación.
Bastarán 35 días cotizados para que los parados sin prestación accedan a esa ayuda
Yolanda Díaz, ministra de Trabajo, avanzó la semana pasada que podrán acceder a esta ayuda parados sin prestación con tan solo 35 días cotizados. Supondrá un coste total de 14 millones de euros.
El Gobierno también ha aprobado prorrogar hasta el 31 de enero de 2021 la prestación económica extraordinaria por desempleo para artistas en espectáculos públicos. Esta ampliación, cubrirá a unos 35.567 parados sin prestación y tendrá un coste estimado de 95,4 millones.
Por su parte CC.00. y UGT han denunciado que las ayudas “han tardado demasiado en aprobarse” y que el montante de la misma es “menor que el acordado”. Según han señalado, se había pactado un total de 550.000 beneficiarios, en lugar de las 250.000 finales.