Como marca la norma, 48 horas después de la primera votación de investidura, Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, se sometió a otro intento y volvió a perder. Nada nuevo.
Esta vez le bastaba mayoría simple para ser investido presidente del Gobierno, pero, como se esperaba, la Cámara Baja le ha negado su confianza.
En concreto, 177 votos en contra, frente a 172 a favor y uno nulo, de Eduard Pujol, diputado de Junts, que primero respondió ‘sí’ y, luego, ‘no’.
No ha habido sorpresas, por tanto. Feijóo, a sabiendas de que no lograría la investidura, era consciente de que ponía en marcha el reloj de la repetición electoral. Y lo hizo ya el miércoles, pero había que cumplir el trámite restante.
De nuevo, la votación fue pública y por llamamiento, por lo que los diputados debían pronunciar su voto a viva voz.
En esta ocasión, se comenzó por la letra elegida al azar y la primera diputada en votar fue la popular María del Mar Sánchez Sierra.
Así, Feijóo fue capaz de concitar los 137 votos del PP, los 33 de Vox, uno por Coalición Canaria y otro por UPN.
Enfrente, 177 votos en contra, los 121 del PSOE, Sumar (31), ERC (7), Junts (6) Bildu (6), PNV (5) y BNG (1).
Ahora, una vez que se ha confirmado el rechazo al líder popular Francina Armengol, presidente del Congreso, ha ido a Zarzuela para informar al Rey.
De este modo, Felipe VI iniciará el lunes una segunda ronda de consultas antes de proponer, como se supone, a Pedro Sánchez como candidato.
Dicho esto, si el 27 de noviembre ningún candidato logra la confianza de la Cámara Baja, iremos a una repetición electoral.
Por tanto, el Rey disolverá las Cortes y las nuevas elecciones se celebrarán el próximo 14 de enero.
Sin embargo, todo el proceso acorta sus plazos desde la modificación de la Ley Electoral, estableciendo sólo 47 días entre la convocatoria y la celebración de los comicios. De hecho, la campaña electoral sólo dura una semana.