En la reunión bilateral de ayer se abordó el calendario de transferencia de competencias.
Durante un acto de entrega de medallas, Fernando Grande-Marlaska, ministro de Interior, se remitió a la reunión de la Comisión Mixta Gobierno-Euskadi presidida por Meritxell Batet, ministra de política Territorial y Función Pública, que se celebró ayer y que no se reunía desde hace siete años, en donde, aseguró, sería ahí donde se establecería “perfectamente el calendario para abordar las transferencias que queden pendientes con el País Vasco, todas y cada una de ellas en el marco que establezcan ambos interlocutores”.
Este domingo, el ministro afirmó que la competencia en prisiones no estaba dentro de las competencias transferibles sobre las que se hablaría en la Comisión Mixta. “Se abordarán todos los traspasos, pero prisiones no es inmediato”.
Estas, y otras declaraciones hechas el pasado jueves, han creado malestar en el Gobierno autonómico y sensación de descoordinación dentro del propio Ejecutivo central. El lehendakari Íñigo Urkullu elevó su queja porque la afirmación que ahora hacía Marlaska no era lo que se había pactado con Pedro Sánchez, que, según el mandatario vasco, dijo que su intención era traspasar una treintena de competencias, entre ellas las dos más complejas, Prisiones y Seguridad Social.