El nuevo Gobierno que preside Pedro Sánchez ha echado a andar después de que este martes prometieran sus cargos los nuevos ministros y ministras.
En total 22, entre los que se incluyen cuatro vicepresidencias, todas ellas ocupadas por mujeres, y un superministerio, el de Félix Bolaños.
Ante sí importantes retos los que afronta el flamante Ejecutivo, entre las políticas continuistas y otros asuntos que quedaron pendientes de la anterior legislatura.
Así, en Economía, Nadia Calviño deberá tomar una decisión respecto a si se prorrogan las ayudas para enfrentar la crisis de los precios.
Esto es, más allá de lo que prometió Sánchez: mantener el IVA rebajado para ciertos alimentos y las ayudas al transporte público.
Deberá pensar en cómo afectará a la reducción del déficit y la deuda pública en 2024.
Otro de los grandes desafíos del nuevo Gobierno es la progresiva reducción de la jornada laboral sin merma salarial hasta las 37,5 horas.
El objetivo de Trabajo y Economía Social es alcanzar esta meta en 2025 y es uno de los principales puntos del acuerdo de coalición entre PSOE y Sumar.
Además, reformar el despido y el sistema de protección por desempleo, así como recuperar el consenso en el marco del diálogo social.
Asimismo, el primer reto de Transición Ecológica será también de carácter económico: decidir acerca de mantener las medidas para amortiguar la subida de los precios energéticos.
A su vez, la aplicación de una nueva tarifa regulada, lista para entrar en vigor el 1 de enero. Al mismo tiempo, continuar la labor de reformar el mercado eléctrico europeo.
La reforma fiscal, crucial para el nuevo Gobierno
Por su lado, es urgente que Hacienda diseñe la senda de déficit para los próximos años, pero cumpliendo ya las nuevas normas europeas.
Asimismo y casi más importante, elaborar los Presupuestos Generales del Estado para 2024, así como la reforma fiscal y la del sistema de financiación autonómica.
De otra parte, Exteriores afronta la normalización de las relaciones con Argelia, deterioradas por el giro de la postura española sobre el Sáhara.
También, orientar la política hacia nuevos países con nuevo gobierno, como Argentina, además de concluir las negociaciones sobre Gibraltar tras el Brexit.
Respecto a Justicia, la gestión de la ley de amnistía y la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Esto último es imposible sin un acuerdo con el PP. A su vez, tratar de reformar el sistema de elección enfrentaría al nuevo Gobierno con la Comisión Europea.
Por su parte, Defensa tiene ante sí el desafío de alcanzar el 2% del PIB en 2029 para cumplir el compromiso con la OTAN.
De igual forma, continuar con la ayuda militar a Ucrania, así como renovar la cúpula del Ejército.
Para Interior, lo más inmediato es afrontar las protestas en la calle contra la ley de amnistía. También, la constante llegada de inmigrantes irregulares, además de la amenaza yihadista tras el estallido de la guerra entre Israel y Hamás.
Asimismo, resolver las reivindicaciones laborales de los agentes de Policía Nacional y Guardia Civil, a lo que se une reformar la ‘ley mordaza’.
Cumplir los acuerdos con ERC
Entre los retos de Transporte, la transferencia de Rodalies a la Generalitat, algo que forma parte del acuerdo de investidura con ERC.
De la anterior legislatura, queda pendiente una ley de movilidad sostenible para descarbonizar el sector. De igual forma, desarrollar los programas de transporte gratuito y bonificado.
En cuanto a Vivienda y Agenda Urbana, la ministra tendrá que desarrollar la Ley de Vivienda, una de las piezas clave del programa del PSOE.
Por su parte, a Educación le queda pendiente aplicar la nueva prueba de acceso a la Universidad y el proyecto de Ley de Enseñanzas Artísticas.
También, aprobar y negociar el estatuto de la Carrera Docente. En materia de Deporte, que se integra en Educación, la regulación de las elecciones en las federaciones y la organización del Mundial de Fútbol 2030.
De otro lado, el titular de Industria deberá aprobar una Ley de Industria para sustituir a la actual, que data de 1992.
Asimismo, la electrificación del parque automovilístico español.
El cambio climático y su afección al sector agroalimentario es el gran reto del renovado titular de Agricultura, Pesca y Alimentación.
A ello se une la falta de relevo generacional, la sequía y los efectos de la guerra en Ucrania, además de la inflación y las políticas de sostenibilidad de la UE.
Fundamental será el cumplimiento efectivo de la Ley de la Cadena Alimentaria, mientras sigue su pugna con Bruselas por la edición genética. También el uso de fitosanitarios.
Nueva financiación autonómica
Por la parte de Política Territorial, el incorporado ministro lo tiene complicado con dos tercios de las Comunidades Autónomas gobernadas por el PP.
En el aspecto económico en esta materia, la reforma de la financiación autonómica y el traspaso de muchas competencias aún pendientes.
Respecto a memoria democrática, este mismo titular deberá completar la aplicación efectiva de la ley, como la resignificación del Valle de Cuelgamuros.
En Cultura, ya sin Deportes, el nuevo ministro tiene el reto de mantener el bono cultural para jóvenes.
Entretanto, el sector espera el Estatuto del Artista y la Ley del Cine y la Cultura Audiovisual.
Ante sí, la flamante ministra de Sanidad del nuevo Gobierno se ha propuesto acabar con las listas de espera y afrontar la crisis de la Atención Primaria.
Arduas tareas, toda vez que las competencias están transferidas a los ejecutivos regionales y ya se sabe qué han dicho los del PP.
También, desarrollar la ley antitabaco, el real decreto del olvido oncológico, la agencia estatal de salud pública y un programa de salud mental.
Por su lado, Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 hereda el desafío del cambio de modelo de dependencia y la atención a los mayores.
Queda, además, pendiente la ley de servicios de atención a la clientela, la creación de la autoridad de defensa del cliente financiero y la regulación del etiquetado nutricional y la alimentación escolar.
Para Ciencia e Innovación, mantener la inversión en I+D al margen de los fondos europeos, mientras que aplicará la Ley Orgánica del Sistema Universitario.
También, reducir la precariedad laboral y el nuevo Estatuto del Personal Docente Investigador.
Leyes de paridad, trata y racismo
Al mismo tiempo, la titular de Igualdad en el nuevo Gobierno afronta terminar las leyes de paridad, contra la trata y contra el racismo.
Asimismo, renovar el dictamen del Pacto de Estado contra la Violencia de Género y promover un Pacto de Estado contra la LGTBIfobia.
Además, culminar el desarrollo de la ley del ‘sólo sí es sí’, algo todavía pendiente.
También, la lucha contra las violencias digital y económica, el negacionismo y el aumento de la violencia de género entre los jóvenes.
Entre los retos de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el desarrollo y seguimiento de la reforma de las pensiones ya en marcha.
De igual modo, la jubilación parcial, el contrato relevo y la ampliación del permiso de nacimiento hasta las 20 semanas.
En materia de migración, la crisis migratoria, que afecta fundamentalmente a Canarias. Otra de las tareas es la construcción de 14 centros de refugiados y la adaptación de las instalaciones existentes.
Por el lado de Transformación Digital, completar la Agenda España Digital 2026 y ampliar la cobertura de banda ancha a 100 Mbps.
Además, culminar el despliegue 5G y diseñar la estrategia nacional de Inteligencia Artificial.
Para terminar, Infancia y Juventud se enfrenta a la culminación de la Ley de Familias, que incluye nuevos permisos para cuidados.
Una norma que asimila, también, las familias monoparentales con dos hijos a las numerosas, así como reconocer diferentes tipos de familias.