Este sábado, el Mando Oriental de Operaciones del Ejército de China ha iniciado unos ejercicios militares combinados alrededor de Taiwán.
Reacciona, de este modo, al encuentro entre Tsai Ing Wen, presidente de la isla, y Kevin McCarthy, máximo responsable de la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
Una reunión que Pekín considera una afrenta a sus reclamaciones soberanistas sobre Taiwán.
Así, todos los ejércitos de las Fuerzas Armadas chinas llevarán a cabo ejercicios de artillería, despliegues navales y aéreos y simulacros de lanzamientos de misiles.
“Rodearán la isla de Taiwán desde cuatro direcciones”, ha señalado el coronel Shi Yi, portavoz del Mando Oriental, al diario estatal Global Times.
Además, afirmó que estos ejercicios militares envían un “mensaje severo” a las “fuerzas secesionistas” y su “colusión con fuerzas externas”.
Según manifestó, un “movimiento necesario para salvaguardar la soberanía nacional y la integridad territorial”.
En la práctica, estas maniobras vienen a representar un ensayo general de bloqueo sobre la isla. De este modo, plantean un escenario diseñado para impedir el despliegue de las fuerzas taiwanesas e interferencias extranjeras.
A su vez, el Ejército chino ha publicado las primeras imágenes de los ejercicios militares. Unas maniobras caracterizadas por el despliegue de sistemas de lanzacohetes múltiples PHL-191.
Asimismo, se ha desplegado un destructor Tipo 052C, buques de misiles Tipo 22 y misiles antibuque terrestres YJ-12B.
Además, se han desplegado aviones de combate J-10C, una avión de alerta temprana KJ-500 y uno cisterna YU-20.
Entretanto, la división de armamento táctico ha utilizado misiles balísticos convencionales DF-11 en los ensayos de lanzamientos.
Al tiempo, se espera que se incorporen otros tipos de armamento y equipo. Incluirían aviones de guerra electrónica y bombarderos, según un mensaje en Twitter del diario estatal.
Por otra parte, los ejercicios militares se dividen en dos fases. Por un lado, el despliegue de patrullas en alerta de combate. Son las mismas que llevan sobrevolando el estrecho de Taiwán desde hace meses.
La segunda fase consiste en desarrollar los ejercicios combinados. Así los aviones de combate y los buques de guerra “rodearán la isla mientras ejecutan simulacros orientados al combate real”, señalan expertos militares anónimos.