A juicio de Antony Blake, secretario de Estado estadounidense, no es posible un alto el fuego en las hostilidades entre Ucrania y Rusia.
Según explicó, un acuerdo de alto el fuego legitimaría la anexión por parte rusa de los territorios ucranianos ocupados.
En una entrevista con el diario francés Ouest France y el grupo alemán Funke, señaló que “hay quien puede considerar tentadora la idea de un alto el fuego”.
“Lo entiendo. Pero ello implica la captura de una parte sustancial de territorios” de Ucrania “por parte de Rusia y la ratifica en la práctica”, sostuvo.
Así, advirtió de que “eso no sería una paz justa y duradera”. Además, permitiría a Rusia reagrupar tropas y volver a atacar después de un tiempo.
En ese sentido, hizo hincapié en que “Rusia debe llegar al punto en el que esté dispuesta a participar en negociaciones constructivas”.
Por otro lado, la Inteligencia militar británica considera que la red energética ucraniana ha resistido los ataques rusos contra el suministro durante el invierno.
Ahora, señala, ofrece buenas perspectivas para los próximos meses, con la llegada de temperaturas más cálidas.
De este modo, Londres sostiene que “la campaña rusa para degradar la parrilla energética de Ucrania durante el invierno ha fracasado”.
Explica que los ataques rusos masivos contras las infraestructuras energéticas que comenzaron en octubre “se han vuelto más esporádicos desde principios de marzo”.
Con todo, “los ataques a pequeña escala, con menos de 25 municiones empleadas, todavía continúan”.
No obstante, “es muy probable que tengan mucho menos impacto en la red”, apunta la Inteligencia militar británica en su último balance.
Según ha constatado Reino Unido, las operadoras energéticas ucranianas continúan aportando “transformadores de reemplazo” a las infraestructuras afectadas.
Asimismo, “otros componentes críticos”, pese al “enorme desafío logístico” que supone porque se trata de piezas que pueden pesar más de 100 toneladas.
Además, desde Defensa remarcan que “la situación energética en Ucrania probablemente mejorará con la llegada de temperaturas más cálidas”.
Por tanto, considera que “los preparativos para el próximo invierno podrían haber comenzado ya incluso”.