La violación del espacio aéreo de Polonia por parte de dos helicópteros bielorrusos ha provocado un nuevo incidente diplomático entre ambos países.
Es “otro elemento más de la escalada de tensión en la frontera”, ha señalado el Ministerio de Exteriores polaco en un comunicado.
En ese sentido, el Departamento que dirige Zbigniew Rau “emitió una protesta firme y pidió a la parte bielorrusa que explique de inmediato y en detalle el incidente”, reza el documento.
Además, espera que Bielorrusia “se abstenga” de llevar a cabo acciones que conduzcan a una escalada.
Así, el Ministerio de Exteriores de Polonia ha convocado este martes al encargado de negocios bielorruso, en un contexto de máxima tensión por la presencia en suelo de Bielorrusia de mercenarios del Grupo Wagner.
Por otro lado, el Ministerio de Defensa polaco ha indicado en otro comunicado que los helicópteros cruzaron la frontera por el área de Bialowieza.
Detalla que lo hicieron “a una altitud muy baja”, por lo que “su detección por parte de los sistemas de radares” resultó dificultosa.
Ante los hechos, Varsovia va a incrementar la presencia de militares en la frontera. Asimismo, asignará fuerzas y recursos adicionales, lo que incluirá helicópteros. De todo ello ha informado a la OTAN.
De otra parte, ante la tensión causada por los paramilitares de Wagner en Bielorrusia, Aleksander Lukashenko, presidente bielorruso, ha asegurado que los mercenarios no van a dirigirse a la frontera con Polonia.
En declaraciones a los medios explicó que el papel de los miembros de Wagner es instruir a las Fuerzas Armadas de Bielorrusia.
Según ha señalado, “escuché recientemente que Polonia se ha vuelto loca porque supuestamente algún destacamento venía aquí [a la frontera], hasta cien personas. Ningún destacamento del Grupo Wagner de cien personas se ha mudado aquí”.
No obstante, indicó que los paramilitares se alojan en Brest y Grodno, localidades a pocos kilómetros de la frontera polaca.
Con todo, insistió en que la principal tarea del Grupo Wagner es instruir al Ejército bielorruso. “Debe entrenar a mi Ejército”, zanjó.