La reducción de la jornada laboral hasta las 37,5 horas semanales en 2025 será el objeto de una negociación bipartita entre sindicatos y patronal.
Unas conversaciones que irán en paralelo a las que se mantengan con el Gobierno.
Así lo ha anunciado Joaquín Pérez Rey, secretario de Estado de Trabajo, tras la reunión de la mesa de diálogo social de este jueves.
“Han pedido poder dialogar bipartitamente a la vez que van negociando con el Gobierno”, señaló Pérez Rey. “Que avancen en diálogo bipartito y el Gobierno irá de manera paralela”, insistió.
Con ello, indicó, se persigue materializar cambios profundos y “no cosméticos”.
Respecto al diálogo bipartito sobre la reducción de la jornada laboral, el secretario de Estado de Trabajo explicó que es algo que se da en todas las negociaciones.
“Los agentes sociales, claro que hablan entre ellos y llevan posturas uniformes” a las mesas de dialogo social. Luego, es en estas en las que se toman las decisiones.
Así, en la negociación se tratará el registro de horario para convertirlo en “una herramienta eficaz que permita a la Inspección de Trabajo reaccionar de manera más contundente y práctica”.
En ese sentido, apuntó que “este debate es crucial para avanzar en la mejora de la vida de los trabajadores”.
Además, explicó que las largas jornadas son la razón por la que “haya personas que no estén dispuestas a trabajar en determinados sectores”. También, que “les suponga un enorme sufrimiento”.
Por otro lado, Pérez Rey avanzó que el Ministerio prevé un endurecimiento de las sanciones en materia de tiempo de trabajo.
“No son lo suficientemente disuasorias para evitar conductas incumplidoras”, añadió.
La reducción gradual de la jornada laboral hasta las 37,5 y, posteriormente, hasta las 32 horas semanales fue una de las medidas estrella de Sumar en la campaña electoral.
De hecho, quedó plasmada en el acuerdo de gobierno que Pedro Sánchez y Yolanda Díaz suscribieron a finales de octubre del año pasado.
Posteriormente, la formación fucsia registró en diciembre en el Congreso una proposición no de ley en ese sentido.