No se aprecian indicios suficientes para investigar a Carles Puigdemont, líder de Junts, por supuestos delitos de terrorismo en el marco del caso Tsunami.
Al menos eso es lo que señala el escrito que, María Ángeles Sánchez Conde, teniente fiscal del Supremo, ha enviado a la Sala de los Penal del Alto Tribunal.
Según considera, en este momento sólo hay “meras conjeturas o sospechas” que no atribuirían delitos al expresident. Por ello, asimismo, pide al Supremo que devuelva la causa a la Audiencia Nacional.
De esta forma, la número ‘dos’ de la Fiscalía fija criterio para el Ministerio Público respecto a la posible implicación de Puigdemont en esta causa.
Además, lo hace en contra del parecer mayoritario de los fiscales del Alto Tribunal, quienes en un informe apreciaban que el dirigente independentista catalán era el líder “absoluto” de Tsunami Democràtic.
Cabe recordar, también, que de los quince letrados de la Junta de Fiscales de Sala acordaron a primeros de febrero investigar a Puigdemont por terrorismo.
Así, tras el escrito de Sánchez Conde, la citada Sala del Supremo tendrá que decidir si le investiga, como pide el juez Manuel García Castellón.
De este modo, la teniente fiscal del Supremo razona que existe insuficiencia de indicios de criminalidad.
No obstante, no pone en duda “la naturaleza delictiva de las acciones ejecutadas bajo el paraguas o cobertura” de la plataforma independentista.
Tampoco pone en cuestión los “gravísimo incidentes” en los disturbios de otoño de 2019 ni las lesiones que sufrieron agentes policiales.
Sin embargo, cree que ninguno de los indicios que García Castellón destaca contra el expresident permite atribuir “de modo razonable” su implicación en Tsunami.
Es más, “al contrario”, considera que podrían descartar “dicha intervención” por parte del dirigente secesionista.
¿Participó Puigdemont en organizar Tsunami?
Al mismo tiempo, señala que lo que se trata de aclarar es si los imputados formaron o no parte de la plataforma respecto a su organización.
A partir de ahí, considera que no existen indicios de que el expresident “participase en la fundación o planificación de las acciones” de Tsunami.
Además, cree que el instructor de la causa “se limita a efectuar conjeturas carentes de base fáctica”.
Por tanto, concluye Sánchez Conde, “nos hallamos ante meras conjeturas o sospechas que no permiten la atribución de hecho delictivo alguno a Carles Puigdemont”.
En esa misma línea, apunta que las reuniones en Ginebra a finales de agosto de 2019 arrojan “poca luz” acerca de la participación del dirigente independentista en la plataforma.
De hecho, pone en cuestión que García Castellón destaque al expresident y no tanto a otros políticos, como sería Quim Torra.
A su vez, tampoco ve indicios en las capturas de pantalla de conversaciones en las que se hace referencia a Puigdemont.
Incluso, podrían considerarse como un “relevante indicador” de su “ajenidad” en la formación de Tsunami. Argumenta la fiscal que los interlocutores hablan de la necesidad de informar al expresident.
Siguiendo esa línea, cree que la conversación del líder de Junts con Josep Campmajó tampoco supone un indicio para acusarle.
En ella, Puigdemont admite que el problema “vendría” si en las protestas “hay algún muerto”. Para la número ‘dos’ de la fiscalía, al dirigente independentista tan sólo le preocupa “la posibilidad de que, a causa de los altercados, pudieran llegar a producirse heridos de gravedad o fallecidos”.