Para frenar la “brutalidad” de Vladimir Putin, presidente de Rusia, con los ataques a infraestructuras civiles en Ucrania, la OTAN ha pedido más sistemas antiaéreos para el país agredido.
Así, Jens Stoltenberg, secretario general de la Alianza Atlántica, ha asegurado que la OTAN “seguirá apoyando a Ucrania todo el tiempo que sea necesario. No retrocederemos. Agradezco a los Aliados por sus contribuciones y en nuestra reunión en Bucarest, pediré más”.
Lo ha hecho en el marco de la reunión de ministros de Exteriores de la Alianza en Bucarest (Rumanía), adelantando que pedirá más ayuda militar. Tanto letal como no letal, ha precisado, como ya hizo a mediados de octubre.
En ese contexto, el jefe político de la OTAN ha destacado que no habrá paz duradera si Rusia gana. Asimismo, volvió a advertir de que, si Putin se hace con la victoria, los aliados “pagarán un precio más alto durante muchos años”.
“La mayoría de guerras acaban con negociaciones”, apuntó. Sin embargo, razonó, “lo que sucede en las mesas de negociación depende de lo que sucede en el campo de batalla. La mejor manera de incrementar sus posibilidades de una solución pacífica es apoyar a Ucrania”.
Por otro lado, Suecia y Finlandia se sentaron como invitados en la reunión. La ratificación de su ingreso en la Alianza sigue pendiente de la aprobación por parte de Hungría y Turquía.
En ese sentido, Stoltenberg ha sostenido que “es hora de finalizar su proceso de acceso y darles la bienvenida como miembros de pleno derecho de la Alianza. Nos hará más seguro y nuestra alianza más fuerte y el área euroatlántica más segura”.