Es difícil asegurar si, finalmente, entrará la ayuda humanitaria a Gaza que espera en la frontera con Egipto, en el paso de Rafá.
Según ha confirmado el Gobierno israelí, Israel lo permitirá. También Joe Biden, presidente de Estados Unidos, ha confirmado desde Tel Aviv que entrará la ayuda humanitaria a Gaza.
Sin embargo, hay condiciones por parte del Ejecutivo que lidera Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí. Sólo podrán entrar alimentos, agua y medicinas.
En cambio, Israel no dejará que llegue combustible, necesario para generar electricidad en los hospitales tras los cortes israelíes.
Además, el Gobierno de Netanyahu ha advertido de que si la ayuda humanitaria termina en manos de Hamás, romperá su compromiso.
A su vez, ha avisado de que habrá consecuencias. Así lo ha trasladado en un comunicado. “Israel no obstaculizará los suministros procedentes de Egipto mientras se trate únicamente de alimentos, agua y medicinas para la población civil situada en el sur de la Franja de Gaza”, ha señalado.
En todo caso, “no permitirá la ayuda humanitaria desde su territorio hasta la Franja de Gaza” mientras Hamás no libere a todos los rehenes. Según datos de las Fuerzas de Defensa israelíes, unas 199 personas.
Por otro lado, mientras Estados Unidos vetaba una resolución de la ONU sobre ayuda humanitaria a Gaza, la Media Luna Roja Palestina denunciaba bombardeos en las inmediaciones del hospital Al Quds, en la ciudad de Gaza.
Allí, según la organización, se refugian más de 8.000 desplazados internos por la ofensiva de Israel contra Hamás en la Franja.
En su perfil en X, informaba de “enormes bombardeos en las zonas de alrededor del hospital Al Quds […], que está sufriendo daños y metralla”.
Asimismo, la Media Luna Roja Palestina alerta de que los ataques representan “una gran amenaza” por el gran número de civiles refugiados en las instalaciones.
Además, ha publicado vídeos de los impactos de misiles “a menos de cien metros” del centro hospitalario.