El próximo martes, día 19 de setiembre, es la fecha señalada para que se puedan empezar a emplear las lenguas cooficiales en el Congreso.
Así lo ha acordado la mayoría progresista de la Mesa de la Cámara Baja. Precisamente, en ese Pleno se debatirá la reforma sobre el uso de las lenguas cooficiales que plantearon PSOE, Sumar, ERC, Bildu, PNV y BNG.
Asimismo, los diputados que así lo quieran podrán emplear otras lenguas no oficiales, como el aragonés o el bable. Eso sí, el parlamentario deberá autotraducirse, pero sin alterar su tiempo de intervención.
De este modo, en todos los Plenos a partir del próximo, el primero de la XV Legislatura, las lenguas cooficiales podrán oírse en la Cámara.
Esto incluye el que se celebrará para el debate de investidura de Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, los días 26 y 27 de setiembre.
Aunque el PP se ha opuesto tanto a la tramitación como a la propuesta de reforma del Reglamento, la mayoría progresista de la Mesa ha dado luz verde.
Según informan fuentes populares, no estaba en el orden del día. Además, han advertido de que implantar la medida sin que se haya aprobado la proposición de reforma es “saltarse las reglas parlamentarias”.
A su vez, indican que no cuenta con un informe jurídico, a lo que añaden que la propuesta es de “dudosa constitucionalidad”.
Argumentan que implantar la posibilidad de usar una lengua distinta al castellano sin limitación afecta a “todo el funcionamiento de la Cámara”.
Dicho esto, este jueves la Junta de Portavoces concretará cómo se deben realizar las contrataciones de traductores para los próximos Plenos.
Entretanto, fuentes de la Mesa detallan que se harán contratos puntuales de carácter “extraordinario y excepcional”. Por tanto, no es necesario abrir ahora un concurso público.
Se basan en el ejemplo de cuando Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, intervino en una sesión plenaria en el Congreso.