Se trata de conseguir que coches y furgonetas reduzcan sus emisiones un 30% entre 2021 y 2030.
La Comisión Europea aplicará de manera decisiva los compromisos de la UE para la reducción nacional vinculante de CO2 firmados en el Acuerdo de París, que obliga a una reducción de al menos un 40% hasta 2030. Jean-Claude Juncker, presidente de la Comisión, durante el discurso del Estado de la Unión Europea en septiembre ya dijo: “Quiero que Europa sea el líder en la lucha contra el cambio climático. El año pasado establecimos las reglas globales del juego con el Acuerdo de París ratificado aquí, en esta misma Cámara. Frente al colapso de la ambición en los Estados Unidos, Europa debe garantizar que hagamos que nuestro planeta vuelva a ser grandioso. es la herencia compartida de toda la humanidad”.
Para 2021 la media de las emisiones de los vehículos de una marca no podrá sobrepasar los 95 gramos de CO2. En España, los automóviles nuevos que se vendieron durante 2016, registraban un promedio de 114,4 gramos por kilómetro, un 0,8% menos respecto a 2015, incluso por debajo de la media de la Unión Europea, 118,1 gramos de CO2 por kilómetro. En 2017, se va a mantener la media obtenida en 2016 en España, aunque podría subir ya que han aumentado las ventas de vehículos de gasolina, que emiten más cantidad de CO2 que los diésel, que tienen catalizador y el sistema EGR para eliminar los gases más nocivos y partículas, aunque ya se están introduciendo estos sistemas en los vehículos de gasolina.