El presidente de la Fundación Socialdemócrata, Antonio Miguel Carmona, ha advertido a Vox que presentarán una querella en el caso de que traten de imputar a Zapatero delitos falsos, sin prueba alguna y con publicidad manifiesta.
Para Antonio Miguel Carmona, “la calumnia es un delito muy grave que debe ser castigado por la sociedad”. Carmona prosiguió diciendo que “ya pueden esmerarse en presentar pruebas reales y hechos probados, y no divagaciones y recortes de prensa con el único objetivo de hacer propaganda de su formación a cambio de mancillar el nombre del ex presidente del Gobierno”.
La Fundación de Análisis e Iniciativas Socialdemócratas, cuyo presidente es Antonio Miguel Carmona, pondrá en conocimiento de sus servicios jurídicos la querella que ha anunciado Vox y que dicen presentarán en la Audiencia Nacional.
“Estudiaremos con pelos y señales cada coma, cada palabra, cada frase. La honorabilidad del presidente Zapatero está fuera de toda duda. Una cosa es ser pobres incultos como hasta ahora y, otra bien distinta, traspasar la línea del delito con el único objetivo de hacerse propaganda”.
Ya es criticable e, incluso, denunciable, algunas manifestaciones de miembros de Vox diciendo que a los niños homosexuales hay que llevarlos al psicólogo, que las feministas son supremacistas, llamar “puta” a la ministra de Justicia o promover la deportación de migrantes. “En una sociedad justa y de progreso no puede haber delitos que no sean castigados. Y la calumnia y la injuria son delitos”, manifestó Carmona.
Carmona criticó a su vez a “aquellos que callan frente a la mentira, porque la tibieza y el silencio son también culpables”.
¡¡¡ Bravo y mil veces bravo por el señor Carmona !!! estoy totalmente de acuerdo con el, no nos dan miedo, el que acusa tiene la carga de la prueba y más les vale que sus acusaciones no estén fundadas en cotilleos y habladurías. Todo tiene que tener una base cierta y probada que se ajuste a la legalidad, y si se atreven a hacer lo que dicen, esta gente es mucho de bravatas , que lo demuestren ante la justicia y en caso contrario que paguen con la cárcel o con lo que el juez disponga sus atropellos.