Pedro Sánchez, presidente del Gobierno en funciones, ha propuesto en el arranque del debate de investidura “el camino del avance, de la mayoría y del progreso”.
Así, el candidato socialista ha defendido que las democracias deben responder con “seguridad” a las “duras realidades de la gente de a pie”.
Asimismo, a los retos que afronta el mundo, como el cambio climático, la desigualdad o la ola reaccionaria.
A ese respecto, Sánchez ha pedido levantar “un muro de democracia” en lugar de “dar un salvoconducto a la ultraderecha”. Algo de lo que ha acusado al PP de hacer con Vox en Comunidades Autónomas y Ayuntamientos.
Por otra parte, el también secretario general del PSOE se ha lamentado de que Vox haya parasitado al PP, hasta ser indistinguibles.
En ese sentido, explicó que ese camino se consumó tras las elecciones del 28 de mayo y los populares tuvieron que elegir qué derecha querían ser.
Así las cosas, continuó, “Feijóo pudo elegir ser como Ursula Von der Leyen, Emmanuel Macron o Donald Tusk”.
Sin embargo, “se sumó al club reaccionario de Trump, Le Pen, Orban y Santiago Abascal”.
En cambio, frente a esas opciones cuestionando las reglas de la democracia, se ha comprometido a “defender los valores de la democracia y la igualdad”.
“Mientras sea presidente del Gobierno, toda la fuerza del Estado se dedicará a defender los valores de la democracia y la igualdad. Los valores y principios de la Constitución española”, aseveró Sánchez en su discurso de investidura.
Es más, sostuvo que “ni un solo retroceso, ni una sola involución, ni un paso atrás contará con el beneplácito ni con la indiferencia del Gobierno de España. Ninguno”.
Durante la investidura expuso su programa de gobierno
“Mejorar la vida de los españoles y darles una vida más plena” son los objetivos que Sánchez se ha marcado para los próximos cuatro años.
A renglón seguido, fue desgranando las medidas que pondrá en marcha tras ser reelegido jefe del Ejecutivo. Todas ellas, cimentadas en la justicia social y frente al liberalismo clasista y la rabia reaccionaria.
De este modo, en el capítulo económico, su principal objetivo es alcanzar el pleno empleo. Además, busca aprobar un nuevo Estatuto de los Trabajadores, así como seguir subiendo el SMI para mantener el 69% del salario medio.
También, mejoras en la cultura laboral de nuestro país, mejorando la corresponsabilidad y reduciendo la jornada laboral a 37 horas semanales a final de legislatura.
Siguiendo en materia económica, recuperar el poder adquisitivo de los ciudadanos. Por ello, se extenderá la reducción del IVA a los alimentos hasta junio de 2024.
Igualmente, desde el 1 de enero, transporte público completamente gratuito para las personas desempleadas y los jóvenes.
A su vez, crear mejores puestos de trabajo, gracias a los Fondos Europeos y a la transición ecológica, que también ayudarán a conseguir esta meta.
Respecto al Estado del Bienestar, el Gobierno ayudará a las Comunidades Autónomas a reducir las listas de espera en la Sanidad pública. También se compromete a mejorar la Atención Primaria.
Además, el Ejecutivo ampliará la cartera del Sistema Nacional de Salud incorporando odontología y oftalmología para menores.
Para cerrar este capítulo, el candidato a la investidura anunció un pacto de Estado por la salud mental, aumentando el número de psicólogos y psiquiatras.
Educación, pensiones, vivienda, paridad…
Siguiendo en el terreno económico, pero centrándolo en la Educación, Sánchez apuesta por aumentar las becas de comedor y las universitarias.
Asimismo, tiene intención de reducir las tasas educativas y hacer un esfuerzo para que regresen los investigadores que tuvieron que irse de España.
Respecto a las pensiones, seguirán revalorizándose en relación al IPC. Cada año, como anunció, se inyectarán 5.000 millones de euros en el Fondo de Reserva de la Seguridad Social, la ‘hucha’ de las pensiones.
En cuanto a la vivienda, el bono alquiler joven se prorrogará junto a los avales de hasta el 20% de las hipotecas. Su plan también contempla la construcción de 183.000 viviendas en régimen de alquiler asequible.
Por otra parte, el candidato socialista quiere que España siga siendo un referente internacional en Igualdad.
Así, la Ley de Representación Paritaria, que no se pudo aprobar en la anterior legislatura, será una realidad en la actual.
Asimismo el presidente del Gobierno en funciones se compromete a que “por cada euro que retiren los Gobiernos de PP y Vox, nosotros aportaremos diez”.
Otro importante anuncio ha sido el de acabar con la prescripción de la responsabilidad civil en los delitos de agresión y abusos sexuales.
Tras avanzar los principales puntos de su programa de país, Sánchez defendió la amnistía como paso previo a consolidar la concordia.
Tuvo que pasar más de hora y media para que el presidente en funciones pronunciara por primera vez en su discurso de investidura la palabra “amnistía”. Seguramente, era uno de los asuntos con más expectación.
Amnistía para la concordia
En ese sentido, señaló que “en la discordia no hay prosperidad”. “Por eso, elegimos convivencia”, añadió.
Dicho esto, desgranó dos posibles modelos para dar solución al procès independentista.
El PP, dijo, optó por la vía de la imposición y la crispación. Un camino “que nos llevó a un récord en el número de independentistas, calles incendiadas y la mayor crisis territorial e institucional de nuestra democracia”. “El desastre no conviene”, abundó.
En cambio, el futuro Gobierno va a “optar por el diálogo y la convivencia”. “En nombre de España, aprobaremos una amnistía a los hechos del procès que es apoyada por el 80% de los representantes de los catalanes y una mayoría del Congreso de los Diputados”.
De esta forma, avanzó que la norma se tramitará con luz y taquígrafos y total transparencia en la Cámara Baja.
Igualmente, sostuvo que es plenamente constitucional y que es el mismo camino que han transitado otros países. Aludía a Reino Unido o Francia para resolver algunos de sus problemas políticos.
En ese sentido, primero justificó ese camino de reencuentro para garantizar el interés general de los españoles en torno a unos avances políticos y económicos.
Algo que, defendió, apoya masivamente el conjunto de la población.
En segundo lugar, para superar la fractura del 1 de octubre de 2017.
“Nosotros estamos convencidos de que una España unida es una España mejor. Más próspera. Más fuerte”, destacó.
Por último, se mostró optimista a la hora de seguir convenciendo a ciudadanos independentistas de que este país también es un buen país para ellos.
Puedes consultar y descargar el discurso de investidura en este enlace.