Venían avisando los independentistas catalanes que la mesa de diálogo debe celebrarse en julio antes de comenzar a negociar los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Fue el 15 de junio, pero Pere Aragonès no concretó entonces en que se traduciría su velada amenaza si no se cumplía esa condición.
Ahora, en una entrevista en TVE, el vicepresidente de la Generalitat ha dejado caer que el sentido del voto de los independentistas estaría en función de que la mesa de diálogo se reúna “cuanto antes mejor”. “Basta ya de excusas. La mesa se debe reunir”, dijo, añadiendo que quien no quiere negociar nunca encontrará el momento adecuado.
Así, explicó, “el coronavirus no elimina el conflicto político. Es un proceso de negociación política. No es una reunión o una foto, sino un compromiso sincero de abordar democráticamente el conflicto político”.
En ese contexto, en respuesta a si la mesa de diálogo es algo desligado de la negociación de los PGE, Aragonès avisó. “Es evidente que cuando llegas a un acuerdo y hay quien te propone un segundo acuerdo, es bueno que el primero se vaya cumpliendo. Es una cuestión de fiabilidad”, señaló.
Fue más allá hablando de los distintos actores que deben jugar en ese tablero, en referencia a Salvador Illa, ministro de Sanidad. En ese sentido, indicó que han visto “al PSC muchas veces desaparecido, en esta cuestión y muchas otras. Si Illa se quiere comprometer y formar parte de la mesa de negociación, mucho mejor. Cuanto más intenso el compromiso, mucho mejor”.
El también coordinador general de ERC ha insistido en la urgencia de que la mesa de diálogo se reúna cuanto antes. Descarta que se posponga a unas hipotéticas elecciones en Cataluña. En su opinión, basándose en las encuestas, en esos comicios volvería a salir una mayoría independentista en el Parlament.
Por tanto, seguirían defendiendo lo mismo. Al hilo de ello, afirmó que “la solución más democrática es un referéndum, sin represión, y la amnistía para los presos políticos y exiliados”.