Este domingo, en Madrid, Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha asumido, arropado por miles de personas, que su investidura no prosperará.
No lo ha dicho explícitamente, pero su intervención ha sido más la del jefe de la oposición y no de un posible presidente del Gobierno.
Según los populares, más de 60.000 personas acudieron al acto organizado por el partido conservador en la madrileña plaza de Felipe II. Según la Delegación del Gobierno, 40.000.
Allí, Feijóo ha prometido que desde un “mitin, una manifestación” o en el Congreso defenderá una España de “ciudadanos libres e iguales”.
De eso modo, clamaba contra una posible amnistía del procès que, por cierto, ni siquiera se ha iniciado a tramitar ni se sabe si se tramitará.
Así, el líder del PP asumía que en los próximos días de debate no obtendrá la confianza de la Cámara Baja para hacerle jefe del Ejecutivo.
Una amnistía, dijo, que no se votó en las pasadas elecciones del 23J y que es, a su juicio, una “indignidad” y una “cacicada”. Responderá a ella “cueste lo que cueste”, incluso, la presidencia del Gobierno.
Según argumentó, se puede discutir “democráticamente si los españoles han votado cambio o no”. Sin embargo, sostuvo, “lo que no votó ningún español, al menos el 94 %, fue un cambio en el régimen constitucional”.
“Eso no se votó, es un fraude, agravado y reiterado por la misma persona. No vamos a negociar los fraudes”, insistió.
Siguiendo esa línea, exigió que “no nos llamen tontos a los españoles porque no somos tontos”.
“Lo que hacen solo tiene un nombre, indignidad, unos cómplices, el PSOE actual, y solo un responsable, que está en el Palacio de la Moncloa después de haber perdido las elecciones”, proclamó.
Asimismo, el líder popular ha responsabilizado a Pedro Sánchez de un Ejecutivo que se sustente en la “amnistía”. Igualmente, de si hay bloqueo o nuevas elecciones, criticando su “falta de integridad moral y política”.
Para Feijóo, el PSOE no es progresista ni socialista
A su vez, ha cargado contra la “matraca” acerca de la “mayoría progresista”. “Ni son progresistas, ni son socialistas, ni son mayoría”, afirmó.
“No es socialismo cuando pretenden privilegios para una élite de políticos en perjuicio de todos. Eso no es socialismo, es elitismo político”, teorizó Feijóo, dando lecciones de qué es el socialismo.
Además, sin reconocer que su partido está alentando al transfuguismo entre los diputados socialistas, ha tratado de darle la vuelta al argumento.
Según lanzó, no tendrían (los socialistas) problemas en rebelarse porque “en España, el golpismo tiene derechos, primero al indulto, después a la amnistía”.
Al mismo tiempo, ironizando, señaló que, tercero, que les pedirán que les voten, lo que no harán.
Más allá, tras agradecer a Vox, Coalición Canaria y UPN su apoyo en la investidura, ha dado las gracias a “los miembros del PSOE” que “defienden lo que han defendido siempre”.
Podrán ser “expulsados” del partido, dijo, pero son reconocidos por la mayoría, ‘su’ mayoría, como “hombres y mujeres de Estado”.
De este modo, explicó que “esto no va de partidos ni de bloques. Ni siquiera de territorios”. “Buena parte de las personas que están pasando más perjuicios son los que viven en Cataluña y País Vasco”, aseguró.
“Va solo de ilegalidad”, continuó, “va de principios, de tenerlos o no, de derechos, de conservarlos o perderlos y de que nadie puede ser más que nadie en la España constitucional”, sostuvo.