El llamamiento realizado por Japón para que exista un arbitraje internacional acerca de las sentencias de Tribunal Supremo de Corea del Sur, las cuales ordenan que empresas japonesas indemnicen a los surcoreanos que se vieron obligados a trabajar en las fábricas durante la Segunda Guerra Mundial, ha recibido el rechazo de Corea del Sur.
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El Ejecutivo de Japón ha puesto como fecha límite este jueves para aceptar la propuesta de crear un arbitraje donde se resuelva la polémica por las sentencias del Supremo de Corea del Sur, que las empresas japonesas aún no han cumplido y con las que Japón ha reaccionado imponiendo restricciones a las exportaciones a Corea del Sur de materiales de alta tecnología.
Kim Hyun Chong, asesor adjunto de Seguridad Nacional de Corea del Sur, considera que Japón ha violado los principios de la Organización Mundial del Comercio en relación al libre comercio y contra el derecho internacional al imponer, de modo unilateral, restricciones a las importaciones surcoreanas, sin haber acudido a la vía diplomática.
Por su parte, Kim ha manifestado que la propuesta de un arbitraje en el que intervenga un tercero no logrará que se resuelva el conflicto y ello empeorará las relaciones bilaterales.
Taro Kono, ministro de Asuntos Exteriores de Japón, pretende que las relaciones se arreglen por la vía diplomática ya que están muy tensan por el tema de las indemnizaciones.
El Tribunal Supremo de Corea del Sur dictó, a finales del pasado año, dos sentencias en las que se ordenaba a dos empresas de Japón que indemnizaran a los surcoreanos que obligaron a trabajar en las fábricas niponas durante la Segunda Guerra Mundial.