“Lo que ha ocurrido en Afganistán es una derrota del mundo occidental”, aseguró Josep Borrell, Alto Representante de Política Exterior de la Unión Europea.
En una entrevista en RNE, el exministro de Exteriores español, señaló que las imágenes vistas este lunes en el aeropuerto de Kabul recuerdan a las de Saigón.
En una de las que ha dado la vuelta al mundo, se ve a cientos de personas tratando de encaramarse a un avión militar estadounidense. Esas imágenes, dijo Borrell, deben obligarnos a “pensar de qué manera actuamos y cómo defendemos nuestros valores” en el mundo.
Así, el jefe de la diplomacia europea apuesta por “mirarlo de frente y tener el valor de reconocerlo”. Asimismo, “analizar las causas y sus consecuencias, que desde el punto de vista geopolítico serán muy importantes”, afirmó.
A su juicio, “lo que estamos viendo es el acontecimiento geopolítico más grave o más importante desde que Rusia se anexionó Crimea” en 2014. Aseguró que “tendrá ciertamente consecuencias en el equilibrio de poder en el mundo”.
Volviendo a lo visto en el aeropuerto de Kabul, reiteró que “no son precisamente reconfortantes”. “Golpean las conciencias de todos y tenemos que aceptar y asumir que después de 20 años de guerra las cosas no han ido bien”, lamentó.
Así las cosas, insistió en que lo sucedido en Afganistán debe obligar al bloque comunitario a “reflexionar”. En su opinión, hay que pensar “de qué manera podemos hacerlo mejor” para defender los valores democráticos y los Derechos Humanos en el mundo.
Máxima preocupación de Borrell por las mujeres y niñas afganas
A su vez, admitió que hay preocupación entre los Estados miembros sobre la situación en la que quedan mujeres y niñas en el país centroasiático.
En ese sentido, destacó que “la visión que tiene de la mujer el mundo talibán está en las antípodas de lo que nosotros defendemos. Es la visión más radicalmente contraria a la de la igualdad de la mujer y la igualdad de sus derechos y oportunidades”.
Sin embargo, recalcó, “no basta con expresar preocupaciones, eso lo puede hacer cualquiera. Lo que hay que hacer es intentar poner remedios con los medios de que disponemos”.
No obstante, admitió que en la Unión Europea las opciones son “limitadas”. En este momento, subrayó, los esfuerzos se centran en la “repatriación de nuestros conciudadanos, de las personas que han trabajado con nosotros y de los más vulnerables”.
Dicho esto, aunque los esfuerzos se centran en ello, esto no quita para que los Estados miembros abran “las puertas” para que lleguen otras personas. Aludía a, por ejemplo, mujeres activistas.
No se prevé una llegada masiva a Europa de “exiliados”
Pese a ello, Borrell descarta la llegada masiva de afganos a Europa. Explicó que la situación geográfica de Afganistán y la dificultad de salir por vía aérea obstaculizan esa posibilidad.
No obstante, dijo, hay que estar preparados para ello. Remarcó que hay que trabajar con los países vecinos y otros de tránsito con el fin de “evitar una crisis humanitaria”.
Sin embargo, a pesar de recalcar que esas personas son “exiliados” y no emigrantes, “en estos momentos dramáticos es la preocupación para pasado mañana”. Lo que ahora preocupa, insistió, es que el aeropuerto de Kabul esté operativo para culminar la evacuación.
Para terminar, también Borrell también tuvo palabras sobre la cara amable que los talibán han tratado de ofrecer desde el domingo. Hay que esperar, dijo, a “ver cómo se concreta”.
Hizo hincapié en que, pese a que haya “escandalizado” mucho de lo visto, “tenemos que hablar con ellos”. Una de las razones, explicó, para lograr que los afganos que quieran salir puedan llegar al aeropuerto de Kabul.