Después de seis meses consecutivos de subidas, el Índice General de Producción Industrial (IPI) cayó un 1,8% en noviembre. Es su mayor retroceso desde octubre de 2021, cuando bajó un 3,1%.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), la caída de la tasa del penúltimo mes del pasado año fue de casi cuatro puntos respecto a octubre.
Así, la producción industrial de la energía fue la que más retrocedió, con un descenso del 9,8%.
Asimismo, los bienes de consumo duradero cayó un 6,3%, mientras que los bienes intermedios retrocedieron un 2,9%. Igualmente, los bienes de consumo no duradero bajaron un 2,1%.
Sin embargo, el sector de bienes de equipo creció un 7,3% interanual, siendo el único que repunta.
Si nos fijamos por actividades, aumentaron su producción en tasa interanual las otras industrias extractivas, con un avance del 39%.
La siguen las industrias extractivas (+37,7%), la fabricación de material y equipo eléctrico (+16,8%) y la fabricación de vehículos de motor (+15,3%).
Al lado contrario, los descensos más pronunciados se dieron en la confección de prendas de vestir, con un retroceso del 27,1%.
A su vez, cayó la industria de la madera y el corcho, con una bajada del 23,8%, mientras que las artes gráficas perdieron un 13,4% interanual.
Sin tener en cuenta la estacionalidad ni el calendario, la producción industrial retrocedió un 1,1% interanual, un 3,2% menos que la tasa de octubre.
Así las cosas, de enero a noviembre de 2022, la media de la producción industrial subió en un 2,8%, siendo un 3% en términos desestacionalizados.
Los mayores avances se registraron en la industria del cuero y el calzado, con un incremento del 13,9%. También, la confección de prendas de vestir (+7,6%).
Por el contrario, los mayores retrocesos se dieron en la metalurgia, con una caída del 8,4%, y en la industria química (-3,2%).