Oriol Junqueras, ex vicepresidente de la Generalitat, y máximo responsable de ERC, ha recibido en los últimos días en la prisión de Lledoners la visita de Pepe Álvarez, líder de UGT, y Unai Sordo, su homólogo de CCOO, para pedirle que pacte la investidura de Pedro Sánchez.
Argumentan que debe haber un Gobierno de PSOE y Unidas Podemos cuanto antes por los riesgos económicos que ya están afectando al mercado laboral.
El líder republicano, condeno a 13 años de cárcel por sedición, ha mostrado su interés en escuchar distintas opiniones previo a tomar una decisión sobre la investidura. Así, fue él quien concertó la cita con los líderes sindicales.
Álvarez y Sordo le transmitieron el discurso, el que vienen realizando en público, haciendo un llamamiento a que termine el bloqueo y un Gobierno en funciones desde hace ocho meses. Así, piden el fin de la interinidad y que se recupere la normalidad política, con la formación de un Ejecutivo con plenas funciones que apruebe unos Presupuestos que impulsen la economía española, se mitiguen los problemas de los servicios públicos y los problemas de pobreza y desigualdad enquistados en España.
Para ambos sindicalistas, un Gobierno progresista como el que formarían PSOE y Unidas Podemos es el que mejor defendería los intereses de los trabajadores antes que cualquier otra opción que, por ejemplo, pasase por el apoyo del PP.
Pese a lo que se pueda pensar, ni Álvarez ni Sordo fueron a Lledoners a presionar a Junqueras, ni llevaron mensaje alguno del PSOE o de Unidas Podemos. De hecho, fuentes sindicales han remarcado que no tienen intención de actuar como mediadores. Son representantes de los trabajadores que muestran su interés en que haya un Ejecutivo que ayude a reactivar la economía española.