Alfonso Rueda (PP), presidente de la Xunta de Galicia, ha confirmado el nivel 2 de alerta por contaminación marina debido a los pellets de plástico que llevan llegando a las costas gallegas desde hace días.
Ha tenido que pasar más de un mes desde los primeros ‘síntomas’ de esta marea contaminante para que reaccione el Gobierno popular en Galicia.
Amparándose en un informe privado de apenas tres páginas, el Ejecutivo gallego ha seguido sosteniendo la no toxicidad de los pellets de plástico.
Y eso que organismos oficiales y expertos de reconocido prestigio llevan advirtiendo de la toxicidad y peligrosidad de estas pequeñas bolas.
Unos objetos que tarde o temprano acabarán en nuestro organismo en forma de microplásticos porque peces y crustáceos los confunden con alimentos.
Sin embargo, en la línea habitual del PP, Rueda ha seguido, hasta la mañana de este martes, negando la peligrosidad de estas bolas.
Con todo y con eso, no ha dado plenamente su brazo a torcer y ha venido a acusar al Gobierno central de inacción.
En unas declaraciones desde A Estrada (Pontevedra), afirmó que, si elevar a dos el nivel de alerta es “el requisito” para que el Ejecutivo central colabore, no habría “ningún problema en hacerlo”.
No obstante, ha seguido tratando sacudirse la responsabilidad y ha exigido al Gobierno central que luche contra esta contaminación en el mar. “Es donde se tiene que hacer ese trabajo”, apostilló.
Y no le falta razón, ya que la competencia de prevención y actuación en las aguas es del Ejecutivo central. Sin embargo, también es verdad que, desbordados los medios en territorio gallego, es competencia del Gobierno regional actuar para que el central intervenga en Galicia.
Pero, claro, estamos en plena precampaña electoral y es preferible desviar el foco de la responsabilidad y evitar asumir responsabilidades. Suena mucho a los “hilitos como de plastilina” del Prestige.
Investigación del vertido de pellets de plástico
De paso, si el Ejecutivo central actuara sin decretarse el nivel dos de alerta, Rueda podría alegar invasión de competencias y tratar de sacar rédito. Todo vale con tal de atacar a Pedro Sánchez y su Gobierno en precamapaña.
Por otro lado, la Fiscalía de Medio Ambiente ha abierto diligencias e investigará los distintos informes y la cronología de los hechos.
Entretanto, Asturias sí ha hecho los deberes y ya declaró el nivel dos de alerta del Plan Territorial de Contingencia por Contaminación Marina Accidental en el Principado (PLACAMPA).
Y lo ha hecho en menos de 24 horas desde que, el lunes, se detectó la presencia de los pellets de plástico en sus arenales.
De este modo, puede pedir ayuda al Ejecutivo central para retirarlos de sus playas.
En esa misma línea ha actuado Cantabria con su Plan Territorial de Emergencias de Protección Civil (Platercant).
Así puede pedir al Estado que intervenga en alta mar y evitar que lleguen masivamente las bolas contaminantes a sus costas. Ya han empezado a llegar a los arenales cántabros.
Bruselas no interviene, pero legislará
Al mismo tiempo, la Comisión Europea ha indicado este martes que son las autoridades nacionales las competentes ante estos vertidos contaminantes.
Asimismo, ha señalado que trabaja a medio y largo plazo con el fin de reducir la contaminación por microplásticos.
En una rueda de prensa, Adalbert Jahnz, portavoz de Medioambiente del Ejecutivo comunitario, explicó que la “Comisión es muy consciente de los impactos adversos de la contaminación por microplásticos y en particular la pérdida de pellets de plástico en el medioambiente”.
Para terminar, el Gobierno Vasco ha activado su plan de emergencia marina, aunque no espera que lleguen las bolas a sus costas esta semana.
No obstante, intentará recogerlas en alta mar para minimizar la cantidad de pellets de plástico que llegue a sus playas.