Dice que las formas de la dirección estatal de Podemos van en contra de las que se le suponen.
Albano-Dante Fachin, hasta ayer secretario general de Podem, anuncio en rueda de prensa que renunciaba a su cargo y abandonaba Podem y Podemos, después de la intervención de Pablo Iglesias para convocar, desde Madrid, una consulta a las bases catalanas sobre si participar las elecciones del 21-D coaligados con CatComú. “Dimitiré como secretario general cuando termine esta rueda de prensa y dejaré la militancia de Podem y de Podemos”, anunció.
Según Fachin, son muchos dentro de Podem que piensan que la indecisión de Pablo Iglesias es “delirante y que ha metido la pata otra vez”. “Pablo Iglesias vuelve a meter la pata como ya hizo el 1-O, que dijo que no participaría y las bases dijeron después que sí lo harían. Otra vez Iglesias vuelve a demostrar la poca capacidad de entender qué pasa en Cataluña”, afirmó.
Recordó que Podem lleva tiempo defendiendo el diálogo en Cataluña y lamentó que se optara por otro tipo de decisiones: “En Madrid se da una orden y en Barcelona, ICV y Barcelona en Comú acatan esa orden”, añadiendo que “los inscritos en Podem decidieron no confluir sin garantías” y que solicitaron a Podemos hacer una consulta para participar en el referéndum del 1-O, recibiendo por respuesta de la dirección estatal que no podía ser porque no había tiempo para organizarla, ni tiempo para auditar los resultados.
Por todos estos motivos abandona Podem, pero no las conversaciones con otras entidades políticas, sindicales y sociales, qué es, precisamente, lo que provocó el desacuerdo entre la marca catalana de Podemos y la dirección estatal de Pablo Iglesias, quién considero que estaba yendo contra la voluntad de la formación al tratar de pactar con partidos independentistas. Ha manifestado que “no iré en la lista de ningún partido. Si es posible un acuerdo entre diversas organizaciones y es posible o se considera que vaya, iré. Pero no iré a la lista de ERC o de la CUP. La idea no es hacer fichajes”, aunque sí participar en un frente amplio contra la actitud del Estado central.