El incremento de la afiliación respecto al nivel previo a la pandemia es especialmente intenso en el empleo de alto valor añadido. Es decir, en sectores como Información y Comunicación y Actividades Profesionales, Científicas y Técnicas.
Estos sectores arrojan crecimientos superiores al 17% frente a la situación prepandemia. De hecho, más de un 20% de los nuevos afiliados se incorpora a estos dos sectores desde entonces.
Por tanto, en un mes como el de abril, en el que se ha alcanzado un récord histórico de 21,1 millones de afiliados, destaca el porcentaje del nuevo empleo de alto valor añadido.
Así se refleja en los datos ofrecidos por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Por otro lado, Dos años después de la entrada en vigor de la reforma laboral, se acentúan sus efectos positivos en la estabilización del empleo y la mejora de su calidad.
En conjunto, ahora hay más de 3,4 millones de afiliados con contrato indefinido que en diciembre de 2021. Este fue el último mes antes de la entrada en vigor de la reforma. En concreto, se trata de 3.489.343 cotizantes.
Se alcanza, de este modo, la cifra histórica de en torno a 14 millones de ocupados con contrato indefinido. Además, de ellos, casi 9,6 millones son a tiempo completo.
Asimismo, en abril, el porcentaje de afiliados con contrato indefinido se situó en el 87,4%, su máximo histórico. De esta forma, crece un 16,9% desde la reforma laboral, mientras que la tasa de temporalidad sigue en mínimos históricos (12,6%).
En el caso de los menores de 30 años, la reducción del nivel de temporalidad es más intensa, bajando un 34%.
Concretamente, pasa del 53,1% al 19,2% respecto al nivel que tenía antes de la reforma.
Al mismo tiempo, los efectos de la reforma laboral se hacen notar en la evolución de los afiliados con contratos indefinidos a tiempo completo en el último año.
Crecen con mayor intensidad, un 4,2% interanual (389.899 más) que los de tiempo parcial (3,8%, 89.552 más) y que los fijos discontinuos (1,7%, 16.788).
Para terminar, el número de trabajadores en ERTE se mantiene en niveles mínimos, en torno a los 10.000, menos del 0,1% del total de afiliados.