Isabel Díaz Ayuso, presidente de la Comunidad de Madrid, ha dejado por segundo año consecutivo con la mitad de docentes a un colegio de Getafe.
En concreto, se trata del colegio público Seseña y Benavente, sólo manteniendo a 6 de las 12 educadoras del ciclo de 0 a 3 años.
El Gobierno de la región no renovará sus contratos a partir del de noviembre.
Así lo ha denunciado el propio Ayuntamiento de Getafe, cuya alcaldesa, Sara Hernández, se ha interesado personalmente sobre la situación.
De hecho, la semana pasada visitó el centro, donde, además de informarse del problema, compartió comedor con los alumnos.
Callada por respuesta
Tras ello, la delegación de Educación solicitó una reunión con la Dirección de Área Territorial Sur (DAT Sur), además de reclamar una solución inmediata. De momento, Ayuso y su Ejecutivo dan la callada por respuesta.
A la gravedad de la situación hay que añadir que el curso comenzó más tarde, precisamente, por la carencia de profesionales.
En palabras de la alcaldesa, “las familias ya tuvieron que empezar el curso más tarde porque no había profesionales. Ahora resulta que los contratos finalizan a mediados de noviembre y nadie hace nada”.
“¿Quién se responsabiliza de la atención a estos pequeños? ¿Cómo van a afrontar 6 personas el trabajo de 12 profesionales?”, denuncia Hernández.
Además, el Consistorio de Getafe critica lo que supondría para los menores la llegada, si se produce, de nuevos profesionales.
La falta de apego con los niños y niñas sería un nuevo trastorno para su adaptación a esta importante etapa educativa de 0 a 3 años.
En todo caso, la Comunidad de Madrid no ha anunciado que vaya a haber nuevas incorporaciones.
El Ayuntamiento de Getafe apoya a las familias
Así, el Gobierno Municipal ha trasladado su apoyo al AMPA del centro, asociación que también reclama soluciones al Ejecutivo de Ayuso.
El Consistorio getafense respaldará todas las acciones que las familias decidan llevar a cabo para lograr una rápida solución al problema.
Asimismo, ha insistido a la DAT Sur para que dé una respuesta inmediata a las familias y proceda a renovar los contratos de las trabajadoras.
Unas profesionales afectadas por una nefasta planificación y que ahora se podrán encontrar sin empleo con el curso iniciado y, por tanto, con bajas posibilidades de reubicación.
desde luego las cosas si de verdad se quiere, se hacen bien