Rescinde el contrato de siete concesiones.
Según informó Íñigo Méndez de Vigo, ministro portavoz, en rueda de prensa, el Gobierno rescatará a ocho de las nueve autopistas de peaje en quiebra. Falta por determinarse la fecha exacta en que la sociedad Seittsa, del ministerio de Fomento, se hará cargo de estas autovías. Se rescinde el contrato de concesión de la radiales R-3 Madrid-Arganda, R-4 Madrid-Ocaña, R-2 Madrid- Guadalajara, M-12 Madrid-Aeropuerto de Barajas, AP-36 Ocaña-La Roda, el tramo Cartagena-Vera de la AP-7 y la Circunvalación de Alicante. Una vez que estén preparados los informes de la Abogacía del Estado y del Consejo de Estado, el Consejo de Ministros ratificará la resolución contractual.
El miércoles 21 de febrero la R-4 pasará a ser de Fomento y el 1 de abril lo harán el tramo Cartagena-Vera y la Circunvalación de Alicante, así como está previsto que el resto de las vías queden asumidas por el Ministerio a lo largo de lo que queda del mes de febrero y marzo. En cuanto a la AP-41 Madrid-Toledo, no se puede rescindir el contrato ya que no se ha alcanzado la fase de liquidación del proceso de concurso de acreedores de la concesionaria. Con estos rescates fomento pretende garantizar la continuidad de la prestación del servicio a los usuarios hasta que se cera de nuevo su explotación a empresas privadas después de convocar el correspondiente concurso público. Abertis, Globalvía, ACS, Ferrovial, OHL, Sacyr y entidades bancarias son los grupos concesionales con los que el Gobierno rescindió el contrato.
El rescate afectará al déficit público de 2018
El ministerio de Fomento calculará y pagará la responsabilidad patrimonial de la Administración después de que queden resueltos definitivamente los contratos de concesión, en compensación por las inversiones realizadas por las empresas concesionarias para construir las autopistas una factura que afectará al déficit público. El Gobierno estima en 2.000 millones de euros el coste del rescate, según el plan de estabilidad enviado a Bruselas, aunque los fondos que tienen la deuda de las autopistas lo calculan en unos 4.500 millones. El cálculo, según el Ejecutivo, es orientativo, señalando que parte de ese coste se cubrirá con los hasta mil millones que espera recaudar al volver a licitar las vías.