En el primer semestre de este año los ingresos por cotizaciones a la Seguridad Social han aumentado un 8,4% respecto a los de 2021.
Esto supone 5.325 millones de euros más, hasta un total de 69.051 millones de euros, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Así, el incremento de los ingresos por cotizaciones sociales alcanza su máximo histórico en los últimos 15 años en un primer semestre. Sólo lo supera 2007, que fue un ejercicio de intensa creación de empleo.
Además, comparando con 2019, el último ejercicio no afectado por la pandemia, el crecimiento de las cotizaciones es del 12,7%. Esto es 7.755 millones de euros más.
“El aumento del empleo sigue impulsando los ingresos por cotizaciones a la Seguridad Social”, señalan desde el Ministerio.
Asimismo, este incremento de los ingresos por cotizaciones supera en más de un 2% el aumento del gasto en pensiones entre enero y junio. Contribuye, así, a reducir el déficit del sistema.
Por otro lado, las cuentas de la Seguridad Social muestran un saldo positivo, al cierre del semestre, de 10.511 millones de euros.
La cifra sale de la diferencia entre derechos reconocidos por operaciones no financieras de 93.512 millones y los 83.001 millones de obligaciones reconocidas. Las primeras crecieron un 11,2%, frente al 3,3% interanual de las segundas.
Hablando en términos de caja, la recaudación líquida llegó a los 92.432 millones, creciendo, así, un 11,5% respecto al ejercicio anterior.
Además, los pagos aumentaron hasta los 82.907 millones de euros, un 3,4%.
Por su parte, detrás de este incremento de ingresos está la evolución positiva y los ingresos por cotizaciones de ocupados.
Esto es consecuencia del dinamismo del empleo que se traduce en un aumento interanual del 9,7%, hasta los 64.832 millones, 5.736 millones más.
Sin embargo, las cotizaciones de desempleados disminuyen un 8,9%, 411 millones de euros menos, consecuencia de la bajada del paro.
Más de 184.000 afiliados en abril y ya son 20 millones los ocupados