Una “revolución (fiscal) de bajada de impuestos” es lo que ha propuesto Pablo Casado, líder del PP y candidato a la Presidencia, entre las medidas en materia económica. Propone eliminar el impuesto de sucesiones y donaciones, bajar el de patrimonio, sociedades, actos jurídicos documentados y la cuota a los autónomos.
Todo ello, dijo en un acto del partido en La Laguna (Tenerife), para que la gente “·tenga más dinero disponible” y en contraposición a las propuestas socialistas, de quienes afirma que cuando dicen que van a armonizar los bolsillo conlleva “echarse la mano a la cartera” porque “van a subirlos”.
En ese sentido, tiró de ironía diciendo que “quien quiera votar al Partido Socialista el próximo 10 de noviembre, tiene que llevar en el sobre la papeleta y 1.000 eurillos que es lo que les va a costar todos los años de más sus impuestos”.
Formando ya parte en toda regla de la campaña electoral, Casado valoró los sondeos electorales que han aparecido, coincidiendo con la macroencuesta que ayer hizo pública el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
Así, señaló que los sondeos dicen que el PP está “a punto” de ganar las elecciones, a tan solo quince escaños del PSOE. Y es así porque su partido es la “única alternativa” a Pedro Sánchez. Por ello, lo que hay que hacer es decir “sólo puede votar al PP para acabar con estas crisis económicas y con lo que está pasando en Cataluña” a quien no quiere un Gobierno de Sánchez.
“Si ya queda claro que ningún otro partido puede ganar a Pedro Sánchez, ahora parece claro que tenemos que pedir ese esfuerzo unido”, apuntó. Luego, añadió que “ahora que nos han llevado a nuevas elecciones es el momento de decir que si los votantes que confían en lo que sabemos hacer en materia económica, de turismo y de unidad territorial nos dan su apoyo, lo que haremos es formar gobierno pronto y evitar que Sánchez siga llevando a España a la crisis económica, la fractura social y la división territorial que estamos sufriendo”.